El gobierno de coalición que nació hace dos meses entre el PSOE y Unidas Podemos ha vivido grandes discrepancias esta semana. Los diferentes enfoques y puntos de vista que tienen los 23 miembros del Consejo de Ministros ha provocado que Pedro Sánchez convoque la comisión de seguimiento del pacto de coalición el próximo jueves.
Esta reunión será la segunda desde que se formara el Gobierno. La primera y última reunión fue el pasado 20 de febrero. Su periodicidad no está establecida, aunque la razón por al que se convoca este encuentro entre ambos partidos es para redirigir la crisis que se ha creado esta semana porque ninguno de los dos partidos está interesado en quebrantar la coalición.
Las discrepancias
Las diferentes posturas de los miembros del Gobierno en diferentes ámbitos han provocado que esta semana haya sido especialmente convulsa para los ministros. La primera fricción surgió de la ley de libertad sexual, que ha enfrentado casi desde su planteamiento a pesos pesados de los socialistas y los miembros del partido morado. La vicepresidenta primera, Carmen Calvo, tenía un criterio muy diferente a la ministra de Igualdad, Irene Montero. Además, se sumó el cruce de acusaciones entre el vicepresidente segundo del Ejecutivo, Pablo Iglesias, con el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo. El primero dijo, sin nombrar a nadie, que hay mucho "machista encubierto" y el titular de Justicia aseguró, horas después, que los políticos "hablamos demasiado".
La segunda disputa es la postura de Moncloa acerca de la polémica sobre la muerte del cámara de Telecinco José Couso. Mientras que la Abogacía del Estado, que depende del Gobierno, defendía recurrir la indemnización por la muerte del trabajaddor que murió en Bagdad en 2003, los ministros de Podemos defendían abonar la cantidad que solicitan.
La gestión del coronavirus ha sido la tercera gran disputa. El Ministerio de Trabajo compartió el pasado miércoles un documento par aque las empresas supieran reaccionar ante posibles casos de coronavirus entre sus trabajadores, instándoles incluso a cerrar si hubiera una amenaza "inevitable". A primera hora del pasado jueves, el Gobierno mandó un comunicado a los medios recordando que es el Ministerio de Sanidad quien gestiona y dirige esta crisis sanitaria.
Por último, las diferentes posturas de los miembros del Ejecutivo acerca de la comisión de investigación en el Congreso al rey Juan Carlos ha provocado un alejamiento evidente entre sus componentes. Mientras que Podemos apoya la propuesta de Compromís de investigar las "presuntas actividad corruptas" del monarca emérito, el PSOE ha denegado su apoyo a la misma porque "el Congreso controla al Gobierno, no a la Jefatura del Estado".