El Gobierno ha aprobado este martes indultos parciales y condicionados a los presos del ‘procés’ “para abrir un nuevo tiempo de diálogo”. Un Consejo de Ministros de más de tres horas dio luz verde “por utilidad pública” a la medida de gracia para los líderes independentistas que aún siguen con condenas vigentes de prisión. El presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, explicó en La Moncloa la decisión. “Existen razones de utilidad pública. Pretendemos abrir un nuevo tiempo de diálogo. La democracia española demuestra hoy su grandeza”, dijo.
De esta manera, el Gobierno exime a los presos de cumplir las penas de prisión pendientes por sedición y malversación, aunque mantiene las inhabilitaciones. El indulto será parcial y condicionado a que los reos no comentan un delito grave en varios años. Está previsto que los presos salgan de la cárcel este miércoles a partir de las doce de la mañana ya con la medida de gracia, según fuentes del entorno de los reclusos.
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, ha asegurado que los indultos aprobados este martes por el Consejo de Ministros abren la puerta a la negociación de un referéndum acordado. Aragonès ha dicho que la medida de gracia es “una manera de reconocer que las sentencias son injustas” y no resuelven “la causa general contra el independentismo”.
Una vez el Ejecutivo publica la medida en el Boletín Oficial del Estado, esta debe aplicarse de forma inmediata. La ejecución corresponde al Tribunal Supremo, que debe dictar los autos de excarcelación en cuanto reciba la notificación oficial de los reales decretos aprobados por el Consejo de Ministros y sancionados por el Rey. El Supremo dirigirá un escrito a las cárceles donde cumplen condena los nueve presos instando a la excarcelación.
La decisión implicará la excarcelación de los nueve líderes independentistas a los que el Tribunal Supremo condenó en octubre de 2019 por sedición a penas de entre nueve y trece años de cárcel: el ex vicepresidente Oriol Junqueras; los ex consejeros Raül Romeva, Joaquim Forn, Jordi Turull, Josep Rull y Dolors Bassa; la ex presidenta del Parlament Carme Forcadell; y los ex líderes de ANC y Òmnium Cultural, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart.
El Ministerio de Justicia asegura en la propuesta motivada que elevó y fue aprobada por el Consejo de Ministros para la concesión del indulto a Jordi Turull que, aunque el dirigente catalán no ha hecho autocrítica ni se ha arrepentido, la medida de gracia “satisface” el “bien común de España” y “se configura como una decisión estrictamente política” cuya justificación y finalidad “está por encima de intereses, razones y criterios individuales”.
El Gobierno trabaja para el entendimiento, no para el enfrentamiento. Es el momento de la política, de pasar página. Tenemos que volver a la vía que nunca se debió abandonar. Concentrémonos en mejorar la vida de nuestro pueblo en este tiempo de dificultades y de esperanzas. pic.twitter.com/arITTltqen
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) June 22, 2021
El departamento dirigido por Juan Carlos Campo reconoce en la propuesta que, aunque los factores vinculados a la percepción que la sociedad tiene de Turull “no le hacen personalmente merecedor del indulto”, su puesta en libertad puede “favorecer objetivamente la vía del diálogo”.
La vicepresidenta primera y ministra de la Presidencia, Carmen Calvo, dijo el martes por la noche en una entrevista en TVE que “concediendo estos indultos resolvemos una herencia tremenda del abandono de la vía política del Partido Popular”. “Estos indultos establecen un espacio de comprensión, lealtad y trabajo común”, sentenció.
