La investigación sobre el espionaje en los móviles del Consejo de Ministros, más alla del del presidente del Gobierno y de la ministra de Defensa, "está terminando". Según fuentes del Palacio de La Moncloa, el Gobierno ya conocería el resultado del análisis acometido en los dispositivos móviles del Ejecutivo realizada de la mano del Centro Criptológico Nacional (CCN), órgano dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
"Si es posible", aseguran, los resultados serán uno de los puntos del día del Consejo de Ministros y se compartirán con la opinión pública en la rueda de prensa posterior. No obstante, ponen en duda el formato a través del cual se harán públicas las conclusiones.
El Gobierno anunció el pasado 2 de mayo que los teléfonos móviles del presidente, Pedro Sánchez; y el de la ministra de Defensa, Margarita Robles, han sido espiados por el programa israelí Pegasus. Las intrusiones se produjeron en torno a mayo y junio de 2021, durante la crisis migratoria con Marruecos y la concesión de los indultos a los líderes del independentismo catalán.
Los piratas extrajeron 2,6 gigas del teléfono del líder del Ejecutivo y 130 megas de la ministra, según el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Félix Bolaños. La ministra de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, informó de "intrusiones consumadas” en las que se ha producido una “extracción de un determinado volumen de datos de los terminales”, y ha calificado las intervenciones de “ilícitas” y “externas”.
"Son unos hechos de enorme gravedad que confirman intrusiones fuera del ámbito nacional y ajenas a la ley. Queremos que la Justicia investigue para conocer toda la verdad. En una democracia plena como la nuestra únicamente están autorizados para hacer intervenciones organismos oficiales y con autorización judicial. Es evidente que estamos ante intervenciones externas e ilícitas. El Gobierno va a ser inflexible con cualquier vulneración de derechos fundamentales. España es un Estado de derecho perfectamente homologable a los países de su entorno", aseguró Bolaños.
Los dos miembros del Ejecutivo aseguraron que han denunciado ante la Audiencia Nacional dicha intromisión en sendos dispositibos. Estos aaques informáticos, según Bolaños, son “ajenos a organismos del Estado”, incluido el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), la única agencia española que oficialmente tiene el programa Pegasus. “Cuando decimos intrusiones externas, queremos decir que son ajenas a los organismos estatales y no cuentan con autorización judicial. Por eso las calificamos de ilícitas y externas”, subrayó.
El portavoz socialista, Felipe Sicilia comenzaba su intervención tras la reunión de la Ejecutiva, haciendo referencia a los excelentes datos económicos y de empleo conocidos la pasada semana, unos datos que confirman “la fortaleza de la economía española a pesar de la pandemia y a pesar de los efectos de la guerra en Ucrania , unos datos que recordaba que la misma presidenta de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, puso en valor, asegurando que España es hoy un ejemplo y un motor dentro de la Unión Europea”. Algo que, en palabras del portavoz, “la derecha no quiere ver”. Mientras, Feijóo y el Partido Popular “no dudan en mentir y retorcer la realidad con tal de no reconocer estos buenos datos”, que más allá de ser un logro del Gobierno, “son un triunfo para el conjunto de la sociedad española”.
Una situación que, para Sicilia, ha convertido a Feijóo en un político alejado de la realidad “negándose a ver los avances de España y alejado también del sentir y las necesidades de la ciudadanía”, haciendo referencia a los votos en contra de la bonificación de la gasolina, de la subida del Ingreso Mínimo Vital o de la bajada de impuestos en la factura de la luz, entre otros. Ante esta situación, “Feijóo, más que hacerle oposición al Gobierno, ha decidido hacer oposición a los ciudadanos”.