Desaparecido cuando huía de los rusos con su abuela, la familia mantenía la esperanza de encontrar al pequeño Sasha, un niño ucraniano de tan solo cuatro años de edad, con vida. Lamentablemente, lo que ha aparecido en las últimas horas ha sido su cadáver. Según informa el diario español El Mundo, quienes han encontrado el cuerpo del menor afirman que ha muerto tiroteado por tropas del Kremlin. Inna Sovsun, ministra de Educación de Ucrania, ha confirmado la noticia, que también ha corroborado la madre del fallecido en redes sociales.
"Hemos encontrado el cuerpo de Sashenka hoy. Gracias a quienes han ayudado en la investigación, agradezco vuestras oraciones y vuestra fe, gracias por el apoyo. Sashenka, nuestro angelito, ya está en el cielo. Hoy su alma ha encontrado la paz", ha escrito la progenitora, Anna Yahno.
Sasha desapareció a mediados de marzo cuando huía con su abuela en el distrito de Vyshgorod, en la región de Kiev. Al parecer, soldados del Ejército de Rusia dispararon contra la embarcación en la que ambos intentaban ponerse a salvo. El niño llevaba un chaleco salvavidas, por lo que sus familiares confiaban en que hubiera logrado sobrevivir y otros refugiados le hubiesen ayudado. En las últimas semanas, realizaron desesperados llamamientos en redes sociales y no pararon de buscarlo.
Por otro lado, el gobernador de Lugansk, al este de Ucrania, ha pedido este sábado a los ciudadanos que quedan en la región, un 30% de los residentes, que huyan cuanto antes. Asegura que la tropas del presidente ruso, Vladímir Putin, están aumentando sus bombardeos en el área. "Rusia está acumulando fuerzas para una ofensiva", ha dicho Serhiy Gaidai. El pasado 25 de marzo, un alto mando del Kremlin afirmó que Moscú se centraría en tomar la región oriental de Donbás, en la que se encuentra Lugansk, tras su infructuoso avance por otros frentes. Además, Rusia ha reorganizado la cúpula militar que dirige las operaciones en Ucrania y ha puesto al frente a un general con experiencia en Siria.
Mientras, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se ha referido a la matanza de 300 civiles a manos de las fuerzas rusas en Bucha, localidad cercana a Kiev que visitó este viernes. "Si eso no es un crimen de guerra, ¿qué es un crimen de guerra?", se ha preguntado. Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha pedido que el ataque de hace unas horas a la estación de tren de Kramatorsk, que ha dejado 52 muertos -en su mayoría niños, mujeres y ancianos- y cientos de heridos, reciba "una respuesta global firme".
Así, la UE prepara ya las medidas para cortar el petróleo ruso. Y es que la nueva masacre de Putin, ahora en la ciudad de Kramatorsk, hace insostenible la resistencia de los países reacios a incrementar las sanciones. En paralelo, una conferencia de donantes ha prometido 10.100 millones de euros para los refugiados. La campaña 'Levántate por Ucrania' ha obtenido el compromiso de gobiernos e instituciones por valor de 5.100 millones.
De su lado, el primer ministro británico, Boris Johnson, se ha presentado por sorpresa en Kiev, donde ha mantenido una reunión con Zelenski, en la que le ha prometido más ayuda militar y financiera. También el canciller austriaco, Karl Nehamer, se ha entrevistado con el mandatario ucraniano y ha dicho que la invasión de Putin es "totalmente inaceptable".