Un día como hoy, pero de 1969, nacía una de las figuras más importantes de la cultura pop de los últimos 30 años, Marilyn Manson, el rockero y príncipe de las tinieblas, promotor de la iglesia satánica, ha conseguido impactar al mundo. Con el pretexto de su onomástico, haremos un repaso por su vida, pero particularmente por una faceta que muy pocos conocen, y esa es su faceta como pintor, ya que el hombre cuenta con una basta colección de obras pintadas por el mismo, que son cuando menos interesantes y que se asemeja a su carrera como música, por su puesto por lo provocadoras y perturbadoras que pueden ser.
La verdad sea dicha, en pleno 2021, la imagen de Marilyn Manson no provoca el mismo impacto que en la década de los dos miles, cuando fue acusado, por ejemplo, de incitar a la juventud de esos años a cometer ilícitos o quitarse la vida. Polémica de la que el también cineasta y actor salió al paso de una forma para muchos magistrales, pues ante las recriminaciones, les dijo a sus detractores, palabras más, palabras menos, que en lugar de acusarlo a él, debían poner más atención a lo que sus hijos estaban diciendo sin ser escuchados; que su mejor atino era, eso: saber lo que los chicos de esa generación quería decir.
Desde entonces el mito se ha creado sólo, y es que, si algo tiene el intérprete de The Beatiful People, es un genio absoluto para sacarle provecho a la sagas inteligencia, al punto de comercializar licores con su nombre, juguetes sexuales y un sinfín de mercancías increíbles que seguros estamos, han redituado una buena cantidad de dinero al hombre las pupilas bicolores y los dientes metálicos.
Sin embargo, una faceta del músico que pocos conocen es la de pintor, y es que más allá de ser un hobbie para el metalero, al parecer es una faceta que se toma con mucha seriedad, pues en sus propias palabras es una especialidad en la que puede dar salida a sus frustraciones más oscuras. Cosa que ha puesto a pensar a más de uno si en verdad funciona, pues sus presentaciones siguen estando plagadas de aberraciones y excesos como sacrificar animales de talla pequeña y encuentros sexuales en vivo.
Desde pequeño fue un chico perturbado, pues se dice que en su trayecto por al escuela primaria, fue víctima de bullying, estigma del que nunca pudo desprenderse y ha llevado hasta el escenario. Pero, otra de las cosas de la que su obra tanto musical como pictórica está repleta, es de una propensión a las desviaciones sexuales y esto podría estar ligado a su abuelo, pue se dice que el hombre tenía gustos extravagantes y de todos ellos, el entonces pequeño chico, fue testigo, al punto de llevarlo a sus creaciones artísticas, en este caso, su pintura.
Sus cuadros se han vendido hasta por 50,000 dólares, cifra nada despreciable en el mundo de la plástica. Lamentablemente, la crítica no ha sido tan benevolente con el rockero, pues la crítica especializada no pasa su obra de intentos pobres y recursos fáciles y provocativos. Uno de los ejemplos más claros, es el vlog de Antonio García Villarán en YouTube, en el que se puede acceder a un análisis mucho más puntual e informado de los cuadros de músico norteamericano.
Por último y sin importar lo que los especialistas de la plástica puedan argumentar, queda claro que al igual que el resto de su obra, consigue impresionar pues son ciertamente piezas con una carga espectral importante y en buena medida, interesante. Ya el tiempo dirá en qué lugar de la historia del arte pictórico es colocado.