El bloque soberanista y nacionalista del Congreso de los Diputados no sacará adelante una de sus “peticiones estrella”: que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparezca en sede parlamentaria para dar explicaciones sobre la salida de Don Juan Carlos de España.
El PSOE y el PP han bloqueado la comparecencia tanto del líder del Ejecutivo como de su número dos, la vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo. Ambas comparecencias deberían haberse celebrado en un pleno extraordinario del Congreso.
Los partidos que firmarán esta petición serán ERC, PNV, EH-Bildu, JxCAT, la CUP, el BNG, Compromís y Más País. Son los mismos partidos que ya lo intentaron el pasado marzo, con el objetivo de "depurar responsabilidades políticas que se puedan derivar, así como para asumir las medidas que se consideren oportunas para fiscalizar la actuación de la Familia Real y personas vinculadas, y evitar que se puedan cometer actuaciones ilegales y/o ilícitas aprovechando la situación privilegiada que ocupan".
Los partidos pidieron la convocatoria de la Diputación Permanente del Congreso y la inclusión en la orden del día de los debates de ambas peticiones. La Mesa del Congreso se escuda es que es “una materia ajena a la competencia” del Gobierno para desestimar dicha petición.
Casa Real lo confirmó el pasado lunes
Don Juan Carlos de Borbón está en Emiratos Árabes Unidos, según ha confirmado Casa Real en un comunicado. El rey Juan Carlos sigue siendo miembro de la Familia Real, con igual tratamiento de la Princesa de Asturias y con escolta privado dependiente del Ministerio del Interior. El Departamento de Comunicación de la Casa Real ha indicado que el emérito ha dado su visto bueno para que "la Casa de Su Majestad el Rey comunique que el pasado día 3 del presente mes de agosto se trasladó a Emiratos Árabes Unidos, donde permanece en la actualidad".
La marcha del que fuera Jefe de Estado entre 1978 y 2014 ha abierto viejas heridas y ha puesto en cuestión a la Casa Real como mejor fórmula para configurar el modelo de Estado. Este anuncio era algo obligado por ser personaje público todavía perteneciente a la Familia Real, siendo el tercero en la línea de sucesión a la Corona.
El rey Juan Carlos sigue siendo miembro de la Familia Real, con igual tratamiento de la Princesa de Asturias y con escolta privado dependiente del Ministerio del Interior. Por lo tanto, no es tanto un viaje privado como una cuestión de transparencia. Sigue siendo un servidor público que, aunque no perciba asignación del Estado alguna, es de obligado cumplimiento anunciar en qué lugar el que fuera monarca durante casi 40 años.