Guatemala enfrenta un grave problema social, desde hace muchos años, debido a la existencia de altos niveles de desnutrición infantil, especialmente en los departamentos donde prevalecen terrenos semiáridos, que ocasionan dificultades en los sembradíos e insuficiencia alimentaria.
Los niños de estas regiones de Guatemala viven en condiciones de pobreza extrema y se ha registrado un incremento de la desnutrición crónica en menores a cinco años. Los chicos que habitan en las zonas rurales tienen dificultades para asistir a las escuelas, aunque muchos niños de las comunidades indígenas tienen un poco más de acceso a la educación; de acuerdo al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, Unicef.
El organismo internacional reportó que en el 2019, los indicadores de desnutrición infantil en las zonas rurales de Guatemala se situaron en 80%. Los padres solo pueden proveerles a sus hijos una dieta desbalanceada, basada casi exclusivamente en tortillas de maíz, situación que deja efectos negativos en su crecimiento.
Los departamentos con zonas semiáridas del este de Guatemala se caracterizan por la ausencia de lluvias y la existencia de terrenos poco fértiles, que obligan a las familias a cultivar en terrenos de montaña.
Altas desigualdades económicas y sociales prevalecen en Guatemala, que afectan especialmente a la infancia, quienes ven limitadas sus posibilidades de crecimiento y desarrollo. Esta situación ha provocado el incremento acelerado de las migraciones, tal como se evidenció durante el año 2019, tras el aumento de las caravanas de centroamericanos que buscaban llegar a Norteamérica, para solicitar asilo político.
Rendimientos agrícolas de Guatemala descendieron en 2019
Al menos, el 18.7% de la población de guatemaltecos habita en los departamentos del este del país, lo que equivale a aproximadamente 300 mil hogares. Los indicadores de la Unicef revelan que, el 50% de las cosechas de maíz y frijoles se perdieron el año pasado.
Otros factores también han ocasionado daños severos en la calidad de vida de las familias guatemaltecas, los cuales recaen directamente sobre los niños, entre ellos: la falta de recursos económicos de los grupos familiares, al alza del desempleo, la caída de la productividad agrícola, en encarecimiento de las gasolinas y de los precios de los alimentos.
Ante esta difícil situación económica de Guatemala, los Gobiernos de México, Estados Unidos y Canadá endurecen sus políticas migratorias, para frenar el flujo de indocumentados a sus territorios.