La "nueva normalidad" de España tras la crisis sanitaria del coronavirus debilitaría a los grandes partidos del espectro político nacional. Según el último barómetro de 40dB para el diario El País y la Cadena Ser, el PSOE ganaría las elecciones con un 26,1% del voto (108 escaños), por delante del PP. El partido de Pablo Casado obtendría el 23,5% de los votos (100 escaños) y les distanciaría poco más de tres puntos porcentuales. Vox sería el tercer partido más votado de España con un fuerte 18,3% de los votos (66 escaños). Unidas Podemos seguiría su tendencia a la baja, manteniendo la cuarta posición, con un 11,8% de los votos (31 escaños)en un momento en el que el partido está encabezado por Ione Belarra, cuyo mandato está diluido en la figura de Yolanda Díaz. Ciudadanos no lograría mantener la hemorragia y caería hasta un 3,6% (dos escaños) sin conseguir fortalecer el proyecto de Inés Arrimadas.
Entre los partidos minoritarios, Más País sería el partido más beneficiado con un 3,6% de los votos (cuatro escaños), por delante de ERC y su 2,5% (13 escaños). JxCat tendría un 1,4% (ocho escaños); mientras que el PNV tendría un 1,2% (seis escaños). EH-Bildu se situaría por detrás, con un 0,8% de los votos (cuatro escaños). El BNG tendría un 0,6% (un escaño); el PRC y Teruel Existe, un 0,1%.(un escaño cada uno).
Por lo tanto, la política de bloques cambiaría radicalmente. El centro-izquierda (PSOE, Unidas Podemos y Más País) aglutinaría el 41,5% de los votos (143 escaños) frente al 45,4% de los votos del centro-derecha del PP, Vox y Ciudadanos (168 escaños). Por lo tanto, lo que arroja esta encuesta es que ninguno de los dos bloques ideológicos tendría mayoría y que el Congreso de los Diputados sería un poco más ingobernable.
Evolución del voto
El PSOE pierde su posición hegemónica como primera fuerza política. Los socialistas tendrían, si se compara el resultado electoral que en los comicios de noviembre de 2019, un resultado peor que en los anteriores comicios. El PP, sin embargo, tendría un resultado electoral mejor que en el pasado 10 de noviembre y sin evitar que Vox siga siendo un partido fuerte en la derecha, subiendo 2,6 puntos. El partido de Santiago Abascal ganaría hasta 3,1 puntos en intención de voto. Unidas Podemos perdería 1,2 puntos. Mientras tanto, el partido de Inés Arrimadas no lograría frenar la hemorragia y perdería 3,3 puntos.
Este estudio sobre intención de voto se publica después de las disputas entre los socios de Gobierno por temas como la reforma laboral y la tensa relación entre Casado y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, por la presidencia del PP de Madrid contra la dirección nacional.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que, “en épocas de cambios tan determinantes como los que vivimos, España siempre mira y confía en la fuerza política que ha impulsado sus principales avances: el Partido Socialista”. El también secretario general del PSOE ha asegurado esta mañana en el Comité Federal que el PSOE está “cumpliendo con nuestros compromisos” estos dos años de legislatura y “continuaremos haciéndolo en los dos próximos años”.
“Nuestro proyecto para España se resume en un verbo: crecer. Crecer en economía; crecer en empleo; crecer en libertades; recer en derechos sociales y laborales; crecer en justicia social. Nuestro proyecto político para España es que España crezca”, ha lanzado entre los aplausos de los asistentes a este Comité Federal semipresencial. Y ha puesto numerosos ejemplos para demostrar que “los socialistas cumplimos”: subiendo el SMI y protegiendo a los trabajadores con los ERTES, “reforzando” el pacto de Estado contra la Violencia de Género, “renovando la ley de Ciencia y “poniendo en marcha un plan de reto demográfico y abriendo un debate sobre la descentralización institucional”, “revalorizando las pensiones conforme al coste de la vida y contribuyendo a llenar de nuevo la hucha de las pensiones”.