El rey Felipe VI presidió el encuentro de ministros de Justicia de los países de lenguas española y portuguesa de América, África, Europa y Asia, primer acto oficial panibérico. Don Felipe acompañado por la ministra de Justicia, Pilar Llop y el presidente de Canarias, Ángel Víctor Torres, entre otras autoridades, presidió en Tenerife un encuentro en el que los ministros de los países de lengua española y portuguesa en América, África, Europa y Asia afirmaron en la Declaración de Tenerife que constituye un primer paso hacia la construcción progresiva de bases firmes en la lucha contra todas las formas de delincuencia en los respectivos países miembros y a nivel internacional, teniendo en cuenta que la delincuencia contemporánea es global.
Durante el acto Su Majestad pronunció unas palabras en castellano y portugués en las que destacó que “Juntos -países iberoamericanos y países de lengua oficial portuguesa- constituimos dos de las grandes Comunidades políticas, demográficas, económicas y culturales del siglo XXI, dotadas de dos de las lenguas de mayor importancia y creciente presencia y vitalidad en el mundo. Podemos, por ello, multiplicar la eficacia de nuestros esfuerzos y utilizar la fuerza de nuestras Comunidades para la defensa y proyección de nuestros valores, así como de nuestros legítimos intereses compartidos en los Foros en los que se debaten los grandes temas de nuestro tiempo.”
También, Don Felipe recordó que, en estos momentos tan duros para las Islas Canarias, “todo gesto de fraternidad hacia la población de La Palma, que sufre las consecuencias del volcán de Cumbre Vieja, es profundamente apreciado. Y muy en particular, por tanto, este Primer Encuentro que se celebra precisamente aquí, en Tenerife, en el corazón del archipiélago canario”.
El Rey expresó su “cercanía y mi cariño a todos los ciudadanos de La Palma -especialmente a los más directamente afectados-, así como mi certeza de que podrán, con la ayuda y la solidaridad de todos, superar estas circunstancias tan difíciles”, y subrayó “el eficaz funcionamiento de las distintas administraciones, servicios e instituciones que hacen todo lo posible para responder a la emergencia, atender las necesidades más básicas o urgentes y resolver los problemas de medio y largo plazo que se plantean, para dar un futuro de esperanza a tantas personas y familias que prácticamente lo han perdido todo”.
Finalizado el acto, Su Majestad el Rey recibió en audiencia a los decanos y representantes del Consejo General del Notariado y mantuvo un encuentro con los asistentes.
El primer encuentro de la Conferencia de Ministros de Justicia de los países iberoamericanos (COMJIB) y su homóloga portuguesa la Conferencia de los Países de Lengua Portuguesa (CMJPLOP) sentó las bases e inició el despegue de una iniciativa pionera que suma un largo centenar de instituciones en un sistema informático cerrado, con garantías de máxima seguridad para intercambios rápidos y fehacientes de solicitudes de cooperación jurídica, con funcionalidades como la videoconferencia y la firma digital.
Asimismo, esta plataforma fortalece la lucha contra delitos como la corrupción, la droga y la trata de personas y, con la activa participación de los estados y poderes públicos, contribuye a la construcción y consolidación de sociedades más justas y pacíficas, dotando de mayor protección a las víctimas y garantizando el acceso general a la justicia; crea, en suma, un espacio social reforzado para la tutela judicial efectiva a disposición de los operadores jurídicos.
También, la Declaración de Tenerife considera la profundización y el desarrollo del acercamiento entre COMJIB y CMJPLOP de mayor relevancia, con el fin de promover acciones de cooperación entre los Estados Miembros de las dos Organizaciones, con el objetivo de fortalecer el estado de derecho y el respeto a los Derechos Humanos.