El viaje que el rey Felipe VI y el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, compartieron para asistir a la toma de posesión del nuevo presidente de Bolivia, Luis Arce, ha servido para acercar posturas entre ambos. Las diferencias son abismales entre ambos, pero testigos directos del viaje aseguran que el trato entre ambos ha sido exquisito.
Desde que el gobierno interino de Bolivia invitara a España a la toma de posesión de su nuevo presidente, La Moncloa quiso que la representación nacional en el país trasatlántico fuera del máximo nivel: decidió que fuera el Jefe del Estado, así como el "número tres" del Ejecutivo y la ministra de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Arancha González Laya. El clima de cordialidad imperó en todo momento por ambas partes.
El jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín; y el jefe de Protocolo de Zarzuela, Alfredo Martínez, estuvieron pendientes en todo momento del vicepresidente. El médico de La Zarzuela proporcionó dosis de paracetamol a todos los viajeros del avión Airbus A310 al aterrizar en un aeropuerto, el de El Alto, que está 4 metros de altura. Los encuentros entre Felipe VI e Iglesias fueron pocos pero buenos, como el de momentos antes de aterrizar para repasar la agenda institucional.
A la vuelta, Felipe VI volvió a tener un gesto con toda la tripulación. Después de los actos oficiales, en una escala técnica en el aeropuerto de Santa Cruz, el Rey regresó con unos panecillos de queso que le habían regalado y recorrió la nave ofreciéndoselos a todos los viajeros, también a Iglesias, con quien compartió momentos distendidos. No obstante, en todo momento se respetaron las medidas de seguridad: se viajó con mascarilla, se guardaron las distancias y cada representante del Estado estuvo a mucha distancia del resto: Iglesias, Laya y el resto de la tripulación se sentaron muy separados mientras que Don Felipe ocupó el lugar que le corresponde como Rey: una cabina aparte en la que tiene una mesa, un sofá cama y una ducha.
Luis Arce Catacora -Movimiento al Socialismo (MAS)- ganó con el 55,1 % de los sufragios, por encima del 50 % más uno que necesitaba para ganar en primera vuelta. En segundo lugar quedó el expresidente Carlos Mesa con el 28,8 % de los votos y el exlíder cívico Luis Fernando Camacho obtuvo el 14 %.
Nacido en La Paz en 1963, es economista titulado en la estatal Universidad Mayor de San Andrés de La Paz con una maestría en la universidad británica de Warwick. Militante socialista desde su juventud, Arce desarrolló su carrera en el Banco Central de Bolivia, entidad a la que ingresó en 1987, hasta que en 2006 juró como ministro de Economía en el primer periodo de Evo Morales.