Solo queda un día para que Pedro Sánchez y Quim Torra se reúnan en el Palau de la Generalitat de Cataluña, y los ánimos están expectantes. El independentismo catalán espera mucho de ese encuentro, en el que intentarán abordar el desafío soberanista desde la perspectiva de la autodeterminación. O eso espera al menos la portavoz del Govern, Meritxell Budó, que ha pedido al presidente del Gobierno que en la reunión se hable de todo “sin vetos para que haya garantías, tal y como se acordó”.
Además, el Govern planea fijar un calendario de negociación pactado con el Palacio de La Moncloa que instaure un orden en la mesa de negociación entre gobiernos. Budó espera que con esta nueva etapa de diálogo y cercanía entre los dos partidos se llegue al “final de la represión y se aborde la autodeterminación si de verdad hay voluntad real de resolver políticamente el conflicto político”.
El Gobierno desinfla las pretensiones independentistas
Fuentes cercanas a Sánchez aseguran que esta reunión con Torra entra dentro de lo habitual y que el presidente del Gobierno se reunirá con todos los presidentes autonómicos a lo largo de 2020 en las capitales de las autonomías. Según Moncloa, este encuentro servirá para abordar “problemas normales” de las autonomías, como el de buscar soluciones para abordar las consecuencias que tuvo el paso de la borrasca “Gloria” por el litoral mediterráneo catalán.
