Jerusalén: Fervor y devoción para conmemorar los últimos días de Jesús en Tierra Santa

La Iglesia del Santo Sepulcro, el Cenáculo, el Monte de los Olivos o la Vía Dolorosa serán los lugares más visitados en la milenaria ciudad que es donde, según la Biblia, sucedieron los hechos
Antonio Gómez
España
23.03.2018
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La festividad de la Semana Santa conmemora los últimos días de la vida de Jesús y desde el Domingo de Ramos hasta el 1 de abril se viven con intensidad los actos religiosos. España es un país especial con este tipo de celebraciones pero nada es comparable a sumergirse en la milenaria Jerusalén donde, según la Biblia, los hechos que se conmemoran sucedieron hace 2 años. Miles de turistas de todo el mundo visitan Israel en estas fechas donde el fervor y la devoción están presentes en cada rincón de sus calles.

Las estimaciones son muy optimistas y todo apunta a que seguirá la tendencia del pasado año porque en abril, que es cuando se celebró la Semana Santa, el número de turistas ascendió a 373.600, un 37% más respecto a 2016. Los españoles también optaron por este destino y visitaron Tierra Santa un total de 5.700, lo que supuso un 99% más respecto a estas fechas hace dos años. La Iglesia del Santo Sepulcro, el Monte de los Olivos, El Cenáculo o la Vía Dolorosa son algunos de los lugares más concurridos durante estos días para todos aquellos que decidieron viajar a Israel. Un país que está a sólo cuatro horas de avión y donde una semana de estancia, dependiendo de las opciones que escoja el turista, ronda los 1.400 euros.

Semana Santa inolvidable en los Santos Lugares

Los franciscanos son los Custodios de los Santos Lugares desde 1217 ya que en ese año, San Francisco de Asis les mandó a todas las naciones, especialmente a Tierra Santa. Viajar a Israel supone traspasar los umbrales de la historia y para la gran mayoría de las personas que lo visitan supone un cambio en sus vidas. Algunos psiquiatras dicen que desde hace años se están dando casos del denominado Síndrome de Jerusalén que sobre todo se da en peregrinos que visitan por primera vez la Ciudad Santa o los lugares mencionados en la Biblia. Quienes lo padecen sufren supuestas alucinaciones y trastornos de personalidad que les hacen incluso creer que son personajes bíblicos.

El Domingo de Ramos en Jerusalén, que se celebra el 25 de marzo, es un día especial ya que se lleva a cabo la tradicional bendición y procesión de las palmas. Los líderes de la Iglesia de la comunidad cristiana como el Patriarca Latino, el Custodio de Tierra Santa y otros obispos se unen a miles de peregrinos en su descenso del Monte de los Olivos.

[Sumario]La celebración de esta fecha está basada en los pasajes de los cuatro evangelios de San Mateo, San Marcos, San Lucas y San Juan ya que en los textos se habla de la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. En el primero de ellos se dice: “..Y la multitud, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino, y otros cortaban ramas de los árboles, y las tendían en el camino. La gente que iba delante y la que iba detrás aclamaba, ¡¡Hosanna al Hijo de David!! !!Bendito el que viene en el nombre del Señor! !!Hosanna en las alturas!.

Última Cena y el Viacrucis por la milenaria ciudad

A partir de ese día se llevan a cabo numerosos actos religiosos que llevarán al Jueves Santo, que se celebra el 29 de abril, que es el día en que los católicos conmemoran la Última Cena y los momentos previos al apresamiento de Jesús. La actividad transcurre en la Iglesia del Santo Sepulcro, el Cenáculo, la iglesia de Santiago y San Marcos. Por la noche, se realizan lecturas en diferentes idiomas en la Basílica de la Agonía en Getsemaní, seguida de una procesión con velas hasta el Monte Sión. El evangelio de San Mateo refleja el momento de la Última Cena donde se dice que “Mientras comían, Jesús tomó el pan, pronunció la bendición, lo partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: Tomen y coman, este es mi Cuerpo”. Después tomó una copa, dio gracias y se la entregó, diciendo: “Beban todos de ella, porque esta es mi sangre…”.

Más tarde tanto Jesús como sus discípulos fueron a Getsemaní, un jardín situado al borde del Valle de Cedrón y, según el Evangelio de San Marcos, se retiró para rezar en privado. En la Biblia viene reflejado que luego, “hablando él aún, vino Judas, que era uno de los doce, y con él mucha gente con espadas y palos, de parte de los principales sacerdotes y de los escribas y de los ancianos. Y el que le entregaba les había dado señal, diciendo: Al que yo besare, ése es; prendedle, y llevadle con seguridad. Y cuando vino, se acercó luego a él, y le dijo: Maestro, Maestro. Y le besó. Entonces ellos le echaron mano, y le prendieron…”.El Viernes Santo es el día de la crucifixión de Jesús, y en Jerusalén se iniciará a las once y media de la mañana una procesión a lo largo de la Vía Dolorosa, que es donde están marcadas la gran mayoría de las estaciones del Víacrucis. Este emblemático camino fue recorrido por Jesús desde que fue sentenciado a muerte por Poncio Pilatos hasta que llegó al Gólgota con la cruz.

La Iglesia del Santo Sepulcro

La Iglesia del Santo Sepulcro es uno de los lugares más sagrados que hay en la actualidad para los cristianos y según los Evangelios, es el punto exacto donde tuvo lugar la crucifixión de Cristo, su enterramiento y la resurrección. En ese escenario es donde se llevan a cabo las cuatro de las últimas estaciones del Viacrucis ya que la décima corresponde a cuando Jesús fue despojado de su vestimenta y la undécima al lugar donde fue clavado en la cruz. La duodécima es donde murió Jesús y la última de ellas correspondería a su descenso cuando es entregado sin vida a su madre. Por la noche, en ese mismo lugar se celebrará la denominada ‘procesión fúnebre’ que representa el entierro de Cristo.

El Sábado Santo se lleva a cabo a primera hora la Oración delante de la Tumba Sagrada y ya por la tarde tendrá lugar una plegaria vespertina delante del Santo Sepulcro mientras que por la noche será la Celebración Pontificia de la Liturgia de las Horas, presidida por el Custodio de Tierra Santa. El ‘día grande’ de la Pascua es el Domingo de Resurrección y durante la jornada se llevan a cabo celebraciones y misas así como una procesión hasta la Iglesia del Santo Sepulcro.

Sin embargo, en Jerusalén no acaban ahí los actos religiosos ya que el Lunes de Pascua se celebran misas en varios puntos de la ciudad. La tradición dice que los peregrinos deben caminar unos 30 kilómetros hacia Emaús para rememorar el camino que dos de los discípulos de Jesús hicieron y donde, según la Biblia, se les apareció después de resucitar. No todos los años la Iglesia ortodoxa y la Iglesia católica, celebran la Semana Santa en la misma fecha ya que ambas suelen tener el calendario litúrgico diferente, siendo el juliano para los ortodoxos, y gregoriano para la Iglesia católica. En 2018 tampoco coincidirá en cuanto a las fechas ya que la Iglesia ortodoxa la celebrará desde el sábado 31 de marzo hasta el 7 de abril.

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