El rey Felipe VI presidió el homenaje internacional a la juez estadounidense Ruth Bader Ginsburg, por parte de la World Jurist Association, en reconocimiento a su compromiso con la defensa del Estado de Derecho. Por la tarde, Don Felipe asistirá a la mesa redonda “La igualdad y el estado de derecho: contribución de las Cortes Internacionales”, y clausurará la primera jornada del encuentro internacional de juristas organizado por la World Jurist Association y la World Law Foundation.
El acto dio comienzo la ceremonia de entrega del Premio WJA Medalla de Honor Ruth Bader Ginsburg con la proyección de un vídeo de la World Jurist Association y la intervención de su presidente, Javier Cremades. Seguidamente, se produjo la presentación de las personas condecoradas con la Medalla de Honor de la World Jurist Association Ruth Bader Ginsburg, y se proyectaron sendos vídeos de saludo de las jueces Navi Pillay, magistrada ad hoc de la Corte Internacional de Justicia de La Haya (Sudáfrica) y Sujata Manohar, magistrada de la Corte Suprema de la India, que no han podido asistir.
Su Majestad el Rey hizo entrega de una Placa como tributo a la figura de la juez Ginsburg, a su hija, la profesora de la Facultad de Derecho de Columbia y presidenta del Jurado, Jane Ginsburg.
El Rey se dirigió a los asistentes y señaló que para que “la Constitución y las leyes sean obedecidas y desplieguen su eficacia es preciso que haya jueces que así lo aseguren. Por ello, además de los controles políticos, electorales y parlamentarios, y del mismo control social por los propios ciudadanos, controles que son consustanciales al Estado democrático, ha de existir el control jurisdiccional que exige un Estado de Derecho”.
“De ahí el papel fundamental que el Poder Judicial independiente desempeña: dota de eficacia a la Constitución y al resto del ordenamiento jurídico, protege las libertades ciudadanas, y asegura, en fin, que el sistema normativo conserve su vigencia.”
Continuó diciendo que la “firme defensa de la Constitución como norma suprema, su constante preocupación por interpretarla de manera adecuada -para que despliegue su doble condición jurídica de límite al ejercicio del poder y garantía de los derechos de los ciudadanos- siempre estuvo unida a su convicción de que la Constitución también desempeña una función política fundamental: ser un verdadero instrumento de integración social, un marco inclusivo en el que la sociedad se refleje, en el que el pluralismo político se garantice, y en el que la esperanza en un futuro mejor se preserve”.
Este encuentro internacional de juristas organizado por la World Jurist Association (WJA) y la World Law Foundation (WLF), creada en 2019 tras la XXVI edición del World Law Congress (WLC) celebrado en Madrid, convirtiendo así a Madrid en la capital mundial del derecho los días 5 y 6 de julio.
Este es un encuentro previo a la celebración de la XXVII edición del WLC, que tendrá lugar en Cartagena de Indias (Colombia) los días 2 y 3 de diciembre de este año. “El objetivo de la WJA es promover la concienciación de la importancia del Estado de Derecho en la sociedad”.