El rey Felipe VI presidió este jueves el acto de reconocimiento al personal participante en misiones en Afganistán, misión finalizada este miércoles tras casi 20 años en territorio asiático, 20 misiones y 102 fallecidos. Tras recibir los honores de ordenanza, Su Majestad el Rey se acercó al avión de transporte T-23 para recibir al último contingente de Afganistán, compuesto por 24 militares y dos intérpretes.
El contingente ocupó su puesto en formación y Don Felipe se drigió a la tribuna real para presidir el acto, que comenzó con la entrada de los guiones de las agrupaciones que han participado en las distintas operaciones llevadas a cabo en Afganistán. A continuación, el comandante del Mando de Operaciones (CMOPS) teniente general Francisco Braco, relató las diferentes operaciones realizadas en Afganistán, y el coronel Alfonso Álvarez Planelles, jefe del último contingente desplegado, entregó a Su Majestad la última bandera nacional que ha ondeado en Kabul (Afganistán).
A su llegada, Don Felipe fue recibido por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y saludó a la ministra de Defensa, Margarita Robles; y al jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante general Teodora Esteban Calderón. La ministra de Defensa, Margarita Robles, aseguró que "tenéis el compromiso de todos nosotros de que haremos que a lo largo de la historia nunca se olvide el sacrificio que habéis hecho por la paz, la libertad y la seguridad”, ha manifestado la titular del Departamento. “Cuando uno sufre en Afganistán, sufrimos en España. Eso lo saben bien las Fuerzas Armadas, la Policía, la Guardia Civil y el Centro Nacional de Inteligencia”, ha resaltado Robles. Además, tuvo un recuerdo especial a los 102 que “fallecieron dando lo mejor de sí mismos, sus vidas jóvenes, para dar la paz y la libertad a otros” y ha pedido también perdón “de todo corazón si alguno de sus familiares en algún momento no se ha sentido acompañado o apoyado”.
Desde hace más de 18 años España participa en las fuerzas de la OTAN que han luchado contra la insurgencia y ayudado a la reconstrucción del país. Desde el primer momento, España se involucró junto a sus aliados en la pacificación y reconstrucción de Afganistán. Una operación en la que nuestras Fuerzas Armadas han realizado 28 patrullas, recorrido tres millones de kilómetros y efectuado más de 1.400 misiones de desactivación de explosivos. En Afganistán se han dejado la vida 102 militares, en accidentes o atentados.
Los primeros 350 militares españoles llegaron a Kabul el 24 de enero de 2002, cuatro meses después de que Al Qaeda lanzara sus ataques contra Washington y Nueva York, en el marco de la operación ISAF (Fuerza Internacional de Asistencia a Afganistán). En 2005, ya bajo mando de la OTAN, España se hizo cargo de la base de Herat y del PRT (Equipo de Reconstrucción Provincial) de Qala-i-Now, al oeste del país. El repliegue del grueso de las tropas se produjo entre 2012 y 2013, cuando España transfirió a las autoridades afganas la seguridad de la provincia de Badghis y la base Ruy González de Clavijo. El 31 de diciembre de 2014 concluyó la operación ISAF y fue sustituida por la Resolute Support, mucho más reducida. Durante estos años han participado unidades de los tres Ejércitos y de la Guardia Civil.