Al Kazemi ha indicado en una serie de mensajes publicados en su cuenta de la red social Twitter que la visita papal "ha supuesto un punto brillante que encarna la esencia de este pueblo sincero y civilizado, que cree en los valores de justicia y paz".
El primer ministro de Irak, Mostafá al Kazemi, ha destacado este lunes que la visita del Papa Francisco al país ha logrado "un consenso nacional" y ha añadido que "su mensaje ha llegado a todo el mundo", después de que el Pontífice pusiera fin a un viajehttps://t.co/EIhXy2rwq4
— vivepais (@vivepais) March 8, 2021
"El mensaje de Su Santidad ha llegado a todo el mundo tras su recorrido con un corazón lleno de esperanza por las ciudades de Irak", ha resaltado el Primer Ministro, quien ha subrayado que Irak "tiene la oportunidad real de restaurar su papel histórico en la región y el mundo pese a todos los obstáculos y desafíos". En este sentido, ha recalcado que un diálogo nacional sería el camino para "satisfacer las aspiraciones del pueblo" y ha invitado a todas las fuerzas políticas a un "diálogo responsable", al tiempo que ha pedido "paciencia y unidad" a los jóvenes. "Soy consciente de la escala de vuestro sufrimiento, vuestras ambiciones y la injusticia a la que hacéis frente", ha destacado.
"La tensión no va a favor de los intereses del país y debe darse tiempo suficiente al Gobierno para edificar sobre lo que se ha logrado durante la última etapa y permitir unas elecciones con pilares justos", ha argumentado.
Por último, ha manifestado que su Gobierno "ha trabajado para restaurar las relaciones exteriores para llevar a Irak a su posición natural". "Hemos logrado pasos en este campo y la visita de su Santidad el Papa es el refuerzo de estos pasos", ha concluido.
Por su parte, el Presidente iraquí, Barham Salí, ha destacado tras despedir al Pontífice en el aeropuerto de Bagdad que "el mensaje de paz y solidaridad humana" del Papa "inspira a Irak para perseverar hacia un futuro mejor para el pueblo de Irak y la región".
Irak se encuentra sumido en una grave crisis política y social a raíz de las protestas iniciadas en 2019, que derivaron a finales de noviembre de 2020 en la dimisión de quien por aquel entonces era primer ministro, Adel Abdul Mahdi. Tras el rechazo a varios nominados, Al Kazemi logró finalmente en mayo de 2020 la aprobación del Parlamento. El nuevo Primer Ministro ha prometido elecciones anticipadas y, si bien estaban previstas para el mes de junio, el Gobierno aprobó en enero aplazarlas hasta octubre tras el llamamiento en este sentido formulado por la comisión electoral.
La Alta Comisión Electoral Independiente (IHEC) había indicado poco antes a través de un comunicado que prorrogaba el periodo de registro de alianzas políticas de cara a las elecciones anticipadas "para permitir más margen para la revisión y registro" debido "al fin pequeño número de alianzas registradas" para los comicios.
Papa Francisco visita cuatro días Irak
El papa Francisco ha concluido su visita de tres días a Irak con una misa multitudinaria celebrada en Erbil, capital del Kurdistán, en la que invitó a los 10 fieles presentes no caer en la venganza, a pesar de las heridas de la guerra y la violencia.
"Aquí en Irak, cuántos de vuestros hermanos y hermanas, amigos y conciudadanos llevan las heridas de la guerra y de la violencia, heridas visibles e invisibles. La tentación es responder a estos y a otros hechos dolorosos con una fuerza humana, con una sabiduría humana", dijo Francisco en su homilía.
El Papa celebró la misa en el segundo estadio más grande del país, el "Franso Hariri" de Erbil, con capacidad para 30 personas, aunque por la pandemia se decidió que sólo pudiera asistir un tercio del aforo.
Previamente se desplazó este domingo hasta la atribulada ciudad de Mosul, la segunda de Irak, donde asistió a un encuentro con la población local en medio de las ruinas del centro histórico, devastado por la batalla que sufrió la localidad en 2017, cuando las tropas locales y una coalición internacional pusieron fin a la égida del Estados Islámico en ese enclave.
El acto de Mosul se desarrolló a escasos metros de la iglesia de Al Tahira, una de los templos que fueron arrasadas durante el conflicto de 2017 y que ahora está siendo rehabilitada por un grupo de trabajadores musulmanes y cristianos.
La comunidad cristiana de Mosul, sin embargo, no ha retornado a la ciudad y han pasado de ser miles a solo un puñado de varias decenas.
Visiblemente emocionado, Francisco aseguró que era muy "cruel" que un país como Irak, "cuna de la civilización, haya sido golpeado por una tormenta de violencia. Un golpe bárbaro, que dejó centros de culto destruidos y muchos miles de personas, musulmanes, cristianos o yazidíes fueron aniquilados o desplazados por el terrorismo".
"La trágica disminución de los discípulos de Jesús (los cristianos) aquí y en Oriente Próximo supone un daño incalculable a la sociedad que dejan atrás. Un tejido social tan rico y diverso se ve debilitado. Al igual que ocurre con una alfombra de un diseño intrincado. Si se quita un hilo pequeño se daña toda la alfombra", agregó.
El avión que transportaba al jerarca católico aterrizó en Erbil alrededor de las 8:30 de la mañana. El Papa se trasladó después en helicóptero a Mosul y a la cercana ciudad cristiana de Qaraqosh.
En Erbil fue recibido en el aeropuerto por el presidente del Kurdistán, Nechirvan Barzani, y el primer ministro local, Masoud Barzani.
La llegada del Pontífice estuvo precedida por un continuo sobrevuelo de helicópteros en torno al emplazamiento, que fue atacado con cohetes el pasado 15 de febrero, en un suceso que costó la vida a un contratista del ejército estadounidense -que tiene tropas desplegadas en esta base- y que fue reivindicado por un grupo armado cercano a Irán.
En el lugar se habían concentrado representantes de las múltiples confesiones que habitan en el norte de Irak. La región kurda y el territorio adyacente de la provincia de Niniveh son el principal reducto de una miríada de diferentes creencias entre las que figuran no sólo los cristianos, sino yazidíes, shabak, sabeos, kakai, o mandeos, que han tenido que afrontar tanto el fanatismo que promovió el Estado Islámico como las consecuencias de la pugna geoestratégica que mantiene Bagdad y Erbil, que en algunos instantes estuvo muy cerca de desembocar en enfrentamientos armados.