En un comunicado, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha asegurado que la UE mantendrá sus contactos "con todos los actores políticos y de la sociedad civil para devolver la democracia a Venezuela, inlcuido en particular Juan Guaidó y otros representantes de la Asamblea Nacional saliente". Aunque reconoce que la Asamblea Nacional elegida en 2015 es la última expresión libre de los venezolanos en un proceso electoral, la UE evita apoyar la extensión del mandato de Guaidó como Presidente de la Cámara y por lo tanto, como presidente encargado.
En diciembre, los 27 decidieron no reconocer el resultado de las elecciones legislativas, al considerar que no cumplieron los estándares internacionales "mínimos" y se dieron un mes de plazo para definir su relación con la Asamblea Nacional. En este sentido, Borrell lamenta "profundamente" que la Asamblea Nacional haya asumido su mandato este martes tras unos comicios que no fueron democráticos. Asimismo, ha reiterado su apuesta por un diálogo nacional inclusivo que permita una salida política a la crisis en Venezuela, que pasa por la celebración de elecciones locales, legislativas y presidenciales.
"La UE llama a las autoridades venezolanas y sus líderes a priorizar los intereses del pueblo venezolano y unirse para empezar una transición liderada por venezolanos que pueda permitir una salida pacífica, inclusiva y sostenible a la crisis", ha añadido la declaración de Borrell , que ha reiterado que la UE está lista para apoyar ese proceso.
El Grupo de Lima respalda a Guaidó
Por su parte, el Grupo de Lima ha anunciado este martes que no reconoce la legalidad de la nueva Asamblea Nacional de Venezuela surgida de los últimos comicios del 6 de diciembre de 2020 y en ese sentido ha mostrado su apoyo al dirigente opositor Juan Guaidó y a su "Comisión Delegada". "No reconocemos la legitimidad ni la legalidad de la Asamblea Nacional instalada el 5 de enero de 2021", pues "es ilegítima, producto de las elecciones fraudulentas del 6 de diciembre de 2020, organizadas por el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro", ha dicho el Gurpo de Lima a través de un comunicado.
"Reconocemos la existencia de la Comisión Delegada encabezada por su legítima Junta Directiva, establecida por la Asamblea Nacional, presidida por Juan Guaidó", dice el texto, en el que también se ha conminado al resto de la comunidad internacional a que "se comprometa de manera urgente con un proceso de transición" con el que se logre "una salida pacífica y constitucional".
"Llamamos a la comunidad internacional a que se una al desconocimiento y al rechazo a esta Asamblea Nacional ilegítima y apoye los esfuerzos para la recuperación de la democracia, el respeto a los Derechos Humanos y el Estado de Derecho en Venezuela", expone.
La declaración ha sido firmada por Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Paraguay, Perú y representantes de Juan Guaidó, quien se autoproclamó "presidente encargado" en 2019.
El chavismo ha dado inicio este martes a la nueva Asamblea Nacional, después de cinco años de control opositor, tras hacerse con una holgada victoria en las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre, a cuyos comicios no concurrió el grueso de la oposición, encabezada por Guaidó, quien llamó al boicot de los mismos. De forma paralela, y en un lugar alternativo a la sede legislativa, los Diputados de la Asamblea Nacional elegida en 2015, han organizado otro acto para reivindicar su continuidad, alegando que las elecciones de diciembre carecieron de las garantías suficientes y que no puede haber un vacío institucional.
Grupo de Lima
Es una instancia multilateral que se estableció tras la denominada Declaración de Lima, el 8 de agosto de 2017 en la capital homónima, donde se reunieron representantes de 14 países con el objetivo de dar seguimiento y buscar una salida pacífica a la crisis en Venezuela. Entre otras cosas, exige la liberación de los presos políticos, pide elecciones libres, ofrece ayuda humanitaria y critica la ruptura del orden institucional en el país sudamericano. Recientemente Bolivia ingresó a este grupo.
Doce países americanos en un principio suscribieron la declaración: Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay y Perú, uniéndose posteriormente Guyana, Haití, Santa Lucía y Bolivia. Siendo avalado también por Barbados, Estados Unidos, Granada, y Jamaica? que asistieron al encuentro, así mismo organismos como la Organización de los Estados Americanos y la Unión Europea, además de la oposición venezolana, han dado su respaldo a dicho documento.? En febrero de 2019 se incorporó a Venezuela, más precisamente al gobierno interino de Juan Guaidó.
En dicha reunión la instancia suscribió un documento en el que declara:
Su condena a la ruptura del orden democrático en Venezuela.
Su decisión de no reconocer a la Asamblea Nacional Constituyente, ni los actos que emanen de ella, por su carácter ilegítimo.
Su pleno respaldo y solidaridad con la Asamblea Nacional de Venezuela, democráticamente electa.
Los actos jurídicos que conforme a la Constitución requieran autorización de la Asamblea Nacional, solo serán reconocidos cuando dicha Asamblea los haya aprobado.
Su enérgico rechazo a la violencia y a cualquier opción que involucre el uso de la fuerza.
Su apoyo y solidaridad con la Fiscal General y los integrantes del Ministerio Público de Venezuela y exigen la aplicación de las medidas cautelares emitidas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Su condena a la violación sistemática de los derechos humanos y las libertades fundamentales, a la violencia, la represión y la persecución política, la existencia de presos políticos y la falta de elecciones libres bajo observación internacional independiente.
Que Venezuela no cumple con los requisitos ni obligaciones de los miembros del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Su seria preocupación por la crisis humanitaria que enfrenta el país y su condena al gobierno por no permitir el ingreso de alimentos y medicinas en apoyo al pueblo venezolano.
Su decisión de continuar la aplicación de la Carta Democrática Interamericana a Venezuela.
Su apoyo a la decisión del Mercosur de suspender a Venezuela en aplicación del Protocolo de Ushuaia sobre Compromiso Democrático.
Su decisión de no apoyar ninguna candidatura venezolana en mecanismos y organizaciones regionales e internacionales.
Su llamado a detener la transferencia de armas hacia Venezuela a la luz de los artículos 6 y 7 del Tratado sobre el Comercio de Armas.
Que, teniendo en cuenta las condiciones actuales, solicitarán a la Presidencia Pro Témpore de la CELAC y a la Unión Europea, la postergación de la Cumbre CELAC-UE prevista para octubre de 2017.
Su compromiso de mantener un seguimiento de la situación en Venezuela, a nivel de Cancilleres, hasta el pleno restablecimiento de la democracia en ese país, y de reunirse a más tardar en la próxima sesión de la Asamblea General de Naciones Unidas, oportunidad en la que podrán sumarse otros países.
Su disposición a apoyar de manera urgente y en el marco del respeto a la soberanía venezolana, todo esfuerzo de negociación creíble y de buena fe, que tenga el consenso de las partes y que esté orientado a alcanzar pacíficamente el restablecimiento de la democracia en el país.