El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha participado este sábado en la Cumbre de Ambición Climática, organizada por Naciones Unidas (ONU), Reino Unido, Francia, Chile e Italia. El encuentro tiene como objetivo renovar los compromisos acordados en el Acuerdo de París en su 5o aniversario y elevar el nivel de ambición antes de la COP26 de Glasgow de noviembre 2021. En esta cumbre, a nivel de jefes de Estado o Gobierno, intervienen 71 dirigentes cuyos países cumplen los requisitos para intervenir en la misma; que estén llevando a cabo planes y acciones ambiciosos y concretos sobre el clima. Sánchez ha presentado la Estrategia a Largo Plazo del Gobierno de España para alcanzar la neutralidad climática en 2050, una medida aprobada el 3 de noviembre de 2020.
La acción climática es una obligación, garantía de futuro para las próximas generaciones. Nuestros pasos para acelerar la transición ecológica son sólidos. Aprovechemos la Cumbre de Ambición Climática para avanzar en este desafío y lograr un progreso global real. #ClimateAction pic.twitter.com/fJJeTfvQOP
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) December 12, 2020
El jefe del Ejecutivo, durante su intervención, ha destacado: “La emergencia climática es el mayor desafío de nuestra civilización. Debemos entender, por tanto, que la acción climática no es solo una inversión potencial para nuestras economías, que lo es, sino una obligación para la seguridad de nuestros ciudadanos y ciudadanas, y también, una garantía de futuro para las próximas generaciones”. Las medidas del Gobierno de España, con perspectiva de equidad y justicia social, prestan especial atención a los colectivos y sectores vulnerables, y a los habitantes de zonas en declive demográfico.
España es un país ambicioso en la lucha contra el cambio climático. Durante 2020, nuestro país ha presentado el Proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, el Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático y en enero se adhirió a la Declaración ante la Emergencia Climática y Ambiental. Esta declaración se alinea con la decisión del Consejo Europeo de ampliar la reducción de emisiones del 40% al 55% para 2030, para alcanzar la neutralidad climática en 2050. En octubre de este año, España ya se comprometió, junto a 10 Estados Miembros, a alcanzar este objetivo.
El Gobierno prevé que en 2030 haya 5 millones de vehículos eléctricos en España y que el 25% del consumo energético industrial proceda del hidrógeno verde en 2050. Nuestras medidas buscan reducir el consumo un 50%, siendo más eficientes, y que el 97% sea de origen renovable. Sánchez ha destacado que estas transformaciones “exigen decisiones difíciles”, especialmente para sectores como las centrales térmicas y las nucleares y la minería del carbón. Por este motivo, se ha aprobado la Estrategia de Transición Justa, “para asegurarnos de que nadie quede atrás”.
“Esta estrategia es una apuesta colectiva por un mundo diferente en el que nuestras casas, nuestros edificios públicos, nuestros coches y nuestros medios de transporte, las oficinas y las fábricas estarán diseñados para contribuir al objetivo último de la neutralidad climática, al objetivo último, en definitiva, de salvar nuestro planeta. Por esto trabajamos”, ha concluido el presidente.