Los hospitales, las ambulancias, las escuelas y los desplazados que escapan de la violencia están siendo objeto de ataques sistemáticos en Siria, causando un gran número de muertos y heridos y haciendo que septiembre sea el mes más letal del año, según el Coordinador Regional Humanitario de la ONU para la Crisis Siria.
“Estoy consternado por los informes de un alto número de víctimas civiles debido a los ataques aéreos en Siria”, dijo Panos Moumtzis, Coordinador Regional Humanitario de la ONU para la Crisis Siria.
“Septiembre fue el mes más mortal de 2017 para civiles con reportes diarios de ataques a áreas residenciales que resultaron en cientos de muertes y heridas relacionadas con el conflicto”, agregó en un comunicado de prensa emitido por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA, por sus siglas en inglés) .
Esta semana, los ataques aéreos en la ciudad de Raqqa mataron a docenas de personas e hirieron a muchos otros mientras que otros 8 permanecen atrapados allí.
Entre el 19 y el 30 de septiembre, los ataques aéreos en zonas residenciales de Idlib causaron la muerte de al menos 149 personas, la mayoría de las cuales eran mujeres y niños.
[Sumario]”Todas las partes en el conflicto deben respetar sus obligaciones internacionales y actuar de manera que garantice la protección de civiles y trabajadores humanitarios”
“Los ataques a instalaciones médicas están privando a las personas que necesitan su derecho a cuidados médicos que salvan vidas”, enfatizó Moumtzis.
Escuelas y hospitales en Idlib se han visto obligados a cerrar por miedo a ser blanco. Tres explosiones en la ciudad de Damasco causaron la muerte de 20 personas e hirieron a 15 más. También se reportaron víctimas civiles en las zonas rurales de Damasco, Hama, Alepo y Deir-ez-Zor.
“Quisiera elogiar el estupendo trabajo llevado a cabo por los trabajadores humanitarios y en particular el personal nacional”, continuó, señalando que los trabajadores de rescate a diario arriesgan sus vidas para ayudar a otros.
“La ONU pide a todas las partes en el conflicto que tomen inmediatamente todas las medidas para proteger a civiles e infraestructura civil en Siria”, subrayó el Sr. Moumtzis. Afirmó que atacar a civiles e instalaciones, incluidos hospitales y otras instalaciones médicas, es “simplemente inaceptable y constituye una grave violación de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario y puede constituir crímenes de guerra”.
