El rey Felipe VI participó el pasado lunes en el 75º aniversario de Naciones Unidas, en una reunión ded alto nivel que congregó a los jefes de Estado y de Gobierno de los países miembro. El monarca aseguró que, en estos tiempos de pandemia de la Covid-19, "necesitamos Naciones Unidas y naciones más unidas" y se mostró escéptico a la hora de pensaar "un mundo sin Naciones Unidas por el trabajo que ha hechjo durane estos años, con un mandato exigente, abordando dificultades y retos de manera constante; un largo periodo que ha hecho de la Organización el referente del mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, del desarrollo y de la protección de los derechos humanos que es hoy".
El discurso íntegro de Felipe VI, a continuación:
"Your Excellencies Heads of State and Government, Mr President of the General Assembly, dear Secretary General, Greetings from Spain and It is truly an honor and a plesure to speak to you on this day…
En este día en el que conmemoramos solemnemente el 75 aniversario de la creación de las Naciones Unidas, quiero compartir con ustedes varias ideas, sentimientos y convicciones.
Por un lado, un sentimiento de gratitud. Resulta difícil imaginar cómo sería el mundo hoy sin Naciones Unidas. Lleva 75 años cumpliendo un mandato exigente, abordando dificultades y retos de manera constante; un largo periodo que ha hecho de la Organización el referente del mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales, del desarrollo y de la protección de los derechos humanos que es hoy.
Por ello, mis primeras palabras son de felicitación y de agradecimiento para todas aquellas personas que la alumbraron y para las que han trabajado a lo largo de siete décadas y media en su noble tarea, incluso en ocasiones dando la vida por los ideales que la sustentan. Gracias de todo corazón.
Junto a la debida gratitud debo resaltar nuestra convicción sobre la necesidad de la mayor unión. Efectivamente, necesitamos más Naciones Unidas y unas naciones más unidas.
A causa de la pandemia, la Humanidad está viviendo una crisis global inédita que pone a prueba a nuestros países y al sistema de Naciones Unidas, pero que también demuestra cuán necesaria es la cooperación internacional estructurada en un mundo cada vez más pequeño.
La respuesta a los desafíos actuales requiere un multilateralismo reforzado, más inclusivo y mejorado, que facilite la colaboración entre actores estatales y la sociedad civil y que redunde en un impacto real, positivo y tangible en la vida de las personas.
Por último, deseo subrayar la idea de compromiso, fundamental para el cumplimiento de los fines de nuestra Organización. España seguirá siendo, en el marco de la Unión Europea, un miembro leal de Naciones Unidas y un socio fiable de sus Estados miembros.
Mantendremos un compromiso activo que promueva acciones concretas en áreas como los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030, la promoción de los derechos humanos y la igualdad de género, la construcción de la paz o la protección del medioambiente.
También por supuesto en la lucha contra el terrorismo, en la lucha para que los delitos graves contra la Humanidad no queden impunes, o en la acción humanitaria basada en principios y en la protección de los más vulnerables; así como en las necesarias transiciones digital y ecológica que debemos todos abordar.
Espero que este mensaje breve y sincero, que recoge el sentir de los españoles, sirva para reconocer la labor de Naciones Unidas como la Organización universal que proyectaron sus fundadores, la casa común de la Humanidad, y para animarla a continuar y perseverar en la noble misión de hacer posible que mejore la vida de las personas.
Hoy todos los Jefes de Estado y de Gobierno que componemos esta Asamblea General hemos adoptado una Declaración solemne que marca el futuro que queremos para nuestros pueblos.
Hagámosla realidad pensando siempre en el conjunto de la sociedad, en el bien común de la humanidad. Cuenten con España en este empeño.
Muchas gracias y feliz 75 aniversario".
