La Jefa de Reagrupación Nacional ha sido la más contundente de los dos al declarar directamente que el Presidente francés, Emmanuel Macron, ha firmado "el peor acuerdo para Francia de toda la Historia de la UE". "Para proteger su ego, ha sacrificado nuestro futuro y nuestra independencia; impuestos europeos, abandono de nuestra agricultura y un compromiso financiero masivo por parte de nuestro país", ha escrito Le Pen en Twitter. El acuerdo también ha recibido críticas por parte de la izquierda francesa. Así, el líder de Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, se ha preguntado en la misma red social "dónde está la ganancia para Francia en este acuerdo". En concreto, ha reprochado a Macron que haya permitido a los "países delincuentes", como se ha referido a los cuatro "frugales" (Países Bajos, Dinamarca, Austria y Suecia), ahorrarse "10 millones de euros cada año" a costa de que Francia pague "unos 2 millones de euros" en su lugar, "el salario de 40 trabajadores sanitarios".
Por su parte, desde Italia, el Viceprimer Ministro y exMinistro de Interior, ha advertido de que "no hay regalos para nadie" porque "es un crédito", algo que ha interpretado como "una derrota incondicional" del Primer Ministro, Giuseppe Conte. El máximo responsable de la Liga ha aseverado que incluso los 390 millones de euros que se entregarán en forma de transferencias (no reembolsables) tendrán que devolverse, dado que estarán financiados con deuda europea. Según Salvini, Italia tendrá que responder a este dinero con más impuestos y reformas. "Habrá un gran coste social y económico para los italianos pero nosostros, como la Liga, nos aseguraremos de que no sea así", ha prometido en Twitter.
Acuerdo histórico en la UE
Los Jefes de Estado y de Gobierno de la UE han alcanzado finalmente este martes, tras una serie de jornadas maratonianas, que comenzaron el viernes en Bruselas, un acuerdo histórico para crear un fondo de recuperación de 750 millones de euros, con el que relanzar las economías del bloque comunitario, especialmente las de España e Italia.
Estos 750 millones se repartirán en 390 millones de transferencias y 360 de préstamos que tendrán que devolver. La entrega de este dinero estará condicionada a planes nacionales de reformas que tendrán que ser aprobados con mayoría cualificada y los desembolsos posteriores dependerán del cumplimiento de objetivos preestablecidos.
Este plan de reconstrucción, que estará financiado por una emisión sin precedentes de deuda conjunta por parte de la Comisión Europea y tendrá una duración de tres años, se sumará a un presupuesto comunitario para el periodo 2021-2027, de 1,074 billones de euros.