Lee Jae-yong, empresario surcoreano y heredero del gigante Samsung, ha sido condenado a una pena de 5 años de cárcel, por delitos de corrupción, soborno a una mujer, amiga del presidente y ocultar bienes, además de mercader con la influencia de poderosos amigos, para lograr contratos y suculentos beneficios.
El tribunal de Seúl, capital de Corea del Sur, ha considerado que Lee Jae-yong, de 49 años, es culpable de soborno, malversación de fondos, perjurio y ocultación de bienes en el extranjero.