El Tribunal Constitucional de Rusia ha aprobado la reforma de la Constitución que Vladimir Putin está impulsando. Entre las enmiendas que ya aprobó el Parlamento el pasado 10 de marzo se encuentra eliminar el límite de dos mandatos para el presidente, lo que permitiría a Putin volver a presentarse a las elecciones de 2024. El Constitucional señala que si alguien ocupa el cargo de presidente por más de dos mandatos consecutivos será porque cuenta con "el apoyo del pueblo".
Ahora le corresponde a la ciudadanía aprobar la reforma de la Carta Magna, en una "votación popular" que tendrá lugar el 22 de abril, siempre y cuando la pandemia del Covid-19 no obligue su aplazamiento.
Putin, uno de los líderes políticos con más influencia a nivel global, lleva 20 años en el poder. Desde el 31 de diciembre de 1999 ostenta el poder en Rusia, tanto como presidente como ejerciendo de Primer Ministro (cargo que desempeñó entre 2008 y 2012, durante la presidencia de Dimitri Medvédev). Si la reforma constitucional obtiene el apoyo mayoritario de los rusos, Putin podría presentarse a la reelección en 2024.y en 2030.
Primeras discrepancias
La reforma constitucional empieza a suscitar críticas. Un grupo de más de 400 personalidades rusas, entre abogados, artistas, científicos, economistas y periodistas, publicó el martes una carta que advierte del "golpe anticonstitucional" que supone.