Grecia ha llegado a un acuerdo con sus acreedores que le permitiría recibir fondos de emergencia críticos a cambio de promesas de aumentar los impuestos y recortar el gasto social. El acuerdo, la culminación de seis meses de conversaciones entre Grecia, la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, fue visto como esencial para evitar un colapso fiscal en Atenas, donde el gobierno se enfrenta a un reembolso de deuda de 7 millones de euros en julio.
Según el acuerdo, Grecia modificará sus mercados de trabajo y energía, reducirá los pagos de pensiones e incrementará los impuestos, dijo el ministro de Economía de Grecia, Euclid Tsakalotos.
“Fumata blanca“, dijo Tsakalotos, aludiendo al método usado por el Vaticano para señalar un acuerdo en la selección de un nuevo Papa. La Agencia de Noticias de Atenas lo citó de manera similar. “El camino ahora se ha pavimentado para las conversaciones de alivio de la deuda”, dijo. Otros debates incluirán formas de reducir la deuda de Grecia.