Estas conversaciones girarían en torno al desarme nuclear entre las dos Coreas.
Con este encuentro, Trump se ha convertido en el primer Presidente de Estados Unidos en el cargo que ha pisado territorio norcoreano.
"Lo importante aquí no es la velocidad", ha declarado Trump al término de un encuentro que se ha prolongado por espacio de 50 minutos, en la Casa de la Libertad de Panmunjom, la instalación dividida entre los dos países.
"Hemos acordado crear unos equipos de negociadores y lo que va a ocurrir en un plazo de dos o tres semanas es que van a comenzar a trabajar juntos a ver si pueden conseguir algo", ha añadido el mandatario.
"Va a ser complicado, pero no tan complicado como la gente cree", ha añadido Trump al término de un encuentro que ha descrito como "histórico" después de la suspensión de las conversaciones sobre desarme nuclear en la cumbre en Hanoi (Vietnam), que ambos mantuvieron en febrero, aunque el Presidente norcoreano la describió como "un gran éxito, porque los dos conservamos nuestra relación", según declaraciones recogidas en la CNN.
"Desde entonces Corea del Norte no ha efectuado pruebas nucleares ni ensayos con misiles de largo alcance, pero sí ha habido mucha buena voluntad, y la sigue habiendo, con perspectivas de mejorar", ha recordado Trump.
En opinión de los expertos, Corea del Norte sí que ha realizado varias pruebas con proyectiles de corto alcance sobre el mar de Japón, como gesto de frustración por la paralización de las conversaciones en febrero.
Un encuentro calificado de "histórico"
El encuentro ha tenido lugar tras muy pocos avisos diplomáticos. Trump ya especuló con la posibilidad de la visita a la zona desmilitarizada durante la cumbre del G20 en Osaka (Japón), que terminó el sábado 29 de junio, pero desde su llegada posterior a Seúl los acontecimientos se aceleraron.
En rueda de prensa con su homólogo surcoreano, Moon Jae In, Trump confirmó su visita inmediata a la zona, la última frontera de la Guerra Fría, que comenzó nada más terminar el encuentro con los medios.
Nada más estrechar la mano de Kim, sobre la línea de demarcación en el área de seguridad conjunta de Panmunjom, que conecta el norte y el sur, Trump decidió atravesar la frontera para convertirse en el primer mandatario de la Casa Blanca que pone pie en Corea del Norte, un gesto aplaudido por el líder norcoreano.
"El Presidente Trump acaba de cruzar la línea de demarcación. Se ha convertido en el primer Presidente de Estados Unidos que visita nuestro país y veo este acto como una expresión de eliminar un desafortunado pasado y abrir un nuevo futuro", ha declarado Kim, codo con codo junto al presidente estadounidense, ante los medios de comunicación.
Por su parte, Trump extendió a Kim una invitación a Washington en viaje oficial.
El encuentro ha sido la tercera reunión entre los líderes de ambos países tras las mantenidas en junio de 2018 en Singapur y en febrero de este año en la capital de Vietnam.
Esta última quedó marcada por la sorprendente suspensión de las conversaciones cuando estaban en pleno desarrollo, parece ser porque Corea del Norte rechazó tajantemente la propuesta formulada por Estados Unidos para que cancelaran su programa balístico y nuclear a cambio de ayuda económica.
Por ello, y en la rueda de prensa previa mantenida en Seúl, el mandatario estadounidense se ha mostrado reticente a describir el encuentro como una cumbre. "Vamos a ver qué pasa hoy antes de comenzar a pensar en esos términos. Es un paso. Podría ser importante, podría no serlo", ha explicado.
El Presidente surcoreano ha confirmado que ha sido invitado al encuentro pero ha anunciado que su diálogo con el líder norcoreano ocurrirá "más tarde", según informa la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
