La Gorilla Foundation, una ONG dedicada al cuidado y la preservación de los gorilas, ha anunciado esta semana la muerte de Koko, una de las gorilas más famosas del mundo, conocida por haber sido capaz de aprender a comunicarse en lengua de signos.
Nacida en el zoo de San Francisco en 1971, Koko comenzó pronto a tratar con la psicóloga de animales Penny Patterson, que le enseñó poco a poco la lengua de signos, consiguiendo que lograse comunicarse con humanos de esta forma.
Las habilidades de Koko la convirtieron en protagonista de varios documentales y reportajes, que mostraban su evolución y sus capacidades. Además, estos documentales también reflejaban otra curiosidad de Koko, su especial amistad con un pequeño gato. Tal era esa amistad, que su historia fue llevada a los libros a través de un cuento infantil.
Ahora Koko se ha convertido ya en leyenda, pero para los miembros de la Gorilla Foundation sigue siendo una figura relevante para llamar la atención sobre la importancia de cuidar y conservar a las especies en peligro de extinción, y sobre lo tremendamente increíbles que pueden ser estos animales.