El anuncio de que España acoge a los 629 migrantes que están a la deriva en el Mediterráneo, Javier Martos, director ejecutivo de UNICET Comité Español, ha señalado que, “nos alivia que estas 629 personas sean acogidas en nuestro país. Entre ellas hay 123 niños solos o no acompañados que nos preocupan particularmente”.
48 horas
Los migrantes fueron rescatados hace casi 48 horas, en su huida, en las costas de Libia, cuando Malta e Italia cerraron sus fronteras y decidieron dejarles a la deriva, en el barco de SOS Meditérranée, Aquarius.
Niños solos
“Los niños solos o no acompañados son especialmente vulnerables a la trata de seres humanos y a la explotación sexual, explica Martos. No debemos dejar que Europa se deshumanice y cierre los ojos ante una realidad de la que nos separan escasos kilómetros. Tener a la deriva a estas personas incumple los mínimos estándares de derechos humanos y asistencia humanitaria. Los pasajeros del Aquarius buscan, como tantos otros que llegan a las orillas de Europa, una oportunidad lejos de los conflictos y de la pobreza sofocante”.
Incumplimos compromisos
La declaración del director ejecutivo de UNICET, recuerda que, “como país, al igual que la mayoría de nuestros vecinos europeos, llevamos tiempo incumpliendo muchos de los compromisos alcanzados en materia de refugiados y migrantes. No se están utilizando los mecanismos previstos para reasentar o reubicar a niños en condiciones de seguridad, y tampoco se están facilitando nuevas vías legales y seguras que impidan que se sigan perdiendo vidas en el mar”.
Que España mejore
“La mayoría de estos niños han realizado un viaje largo y en condiciones penosas. Es fundamental conseguir una derivación rápida a residencias, familias y hogares donde estos niños no acompañados puedan recibir cariño y un tratamiento especializado. Tal y como ha señalado el Comité de los Derechos del Niño, es urgente que España aumente y mejore la calidad de la atención del sistema de protección de menores”, concluye Javier Martos, ante el anuncio español de asilo.