Israel está de cumpleaños este mes ya que celebra sus 70 años como nación pero lo hace con varios frentes abiertos que provocan que todo el mundo esté pendiente de sus movimientos. El anuncio del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reconocimiento oficial de su Gobierno a la ciudad de Jerusalén como capital del Estado de Israel podría complicar la situación en la zona. Además, hace unos días atacó docenas de objetivos iraníes en la vecina Siria en respuesta al lanzamiento de proyectiles contra posiciones israelíes en los Altos del Golán. Celebró el aniversario de acuerdo con el calendario hebreo el pasado 18 de abril pero de forma oficial se recordará mañana lunes. Precisamente, fue un 14 de mayo de 1948 cuando David Ben Gurión, presidente del Consejo Nacional Judío, proclamó el nacimiento del Estado de Israel. Sin embargo, unos meses antes, en diciembre de 1947, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó un plan de partición de Palestina.
De esta forma, se contemplaba la creación de dos estados totalmente independientes, uno árabe y otro judío, y una zona internacional en Jerusalén que estaría bajo la tutela de la propia Naciones Unidas. La propuesta estuvo rodeada de polémica ya que fue aprobada pese a contar con el rechazo frontal de los países árabes. La proclamación del nuevo Estado de Israel fue inmediatamente seguida por el estallido de la primera guerra árabe-israelí que se prolongó hasta enero de 1949, finalizando con la victoria de los israelíes. Las profecías están presentes en el nacimiento de Israel y especialmente la que viene reflejada en Ezequiel 37:4 cuando se dice que “Y pondré en vosotros mi espíritu y viviréis, y os pondré en vuestra tierra, y sabréis que yo, el Señor, dijo esto y lo hice”. Este pasaje bíblico es visto por mucha gente como una promesa de que Dios restauraría a los judíos su tierra y que llegaría incluso después de que murieran más de seis millones de ellos durante la Segunda Guerra Mundial (1942-1945).
División de Palestina
Israel amplió hace 70 años su territorio más allá de las fronteras de la resolución de división de Palestina y en ese momento más de 750 palestinos deben abandonar su territorio. El problema continúa hoy en día aunque hubo numerosos intentos de solucionarlo cuando Israel y la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), bajo Yasser Arafat, aprueban en 1993 en Oslo un plan de paz. Éste consistía fundamentalmente en el retiro de Israel de los territorios ocupados y la fundación de un Estado palestino pero no se cumplió lo que en primer momento se dijo. Aparecen las denominadas Intifadas o “revuelta de las piedras” que fue un movimiento popular en Palestina en contra de las fuerzas de ocupación israelíes.
Las tensiones continuaron cuando, bajo el gobierno de Ariel Sharon, cuando el 16 de junio de 2002 se tomó una decisión polémica. El objetivo era levantar un muro para separarse de Cisjordania, con la excusa de defenderse de los posibles ataques procedentes de los territorios palestinos. Su construcción se inició durante la Segunda Intifada, en 2003, y cuando se haya completado tendrá una longitud que rondará los 700 kilómetros. La muerte de Arafat llevará a reanudar las conversaciones pero los resultados no llegan finalmente y desde entonces el conflicto entre ambas partes continúa sin esperanza alguna.