Pablo Casado no quiere que nada ni nadie contamine su proyecto de reunificar al centro-derecha español en torno a las siglas del PP. La relación que el presidente nacional del partido tiene con Isabel Díaz Ayuso es muy estrecha, pero le ha puesto una línea roja de cara a la gobernabilidad de la Comunidad de Madrid tras el 4 de mayo si la candidata popular tuviera alguna posibilidad de gobernar: Vox tendría que apoyarle desde fuera del gobierno, como hasta ahora.
Fuentes cercanas al líder de la oposición tachan de "locura" el que el partido ultra pueda entrar en el ejecutivo autonómico. Casado quiere que el PP se erija como líder del centro-derecha español para todo el votante conservador, de centro, liberal e incluso progresista disconforme con la gestión de Pedro Sánchez y el gobierno bipartito de España entre el PSOE y Unidas Podemos.
Desde Génova 13 aseguran que Ayuso tiene el camino allanado a la hora de alcanzar entre los 55 y los 60 escaños. La mayoría absoluta de la Asamblea de Madrid se situará en esta segunda parte de la legislatura en los 69 escaños en función de los datos de población. La diferencia de escaños sería la que se llevaría Vox en detrimento de Ayuso, una realidad que asumen con tranquilidad en el PP. Lo único que desean es no tener que depender de Ciudadanos para gobernar en Madrid. Casado confía en que Rocío Monasterio ofrezca su apoyo puntual a los proyectos de ley de Ayuso en el parlamento autonómico.
Casado sigue planeando la refundación del centro-derecha desde el centrismo y la moderación. Por ello, que el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, cierre la lista electoral del PP en la Comunidad de Madrid está cargado de simbolismo. Su perfil moderado, menos crispado, y la buena reputación que obtuvo tras su llamada a la unidad durante los meses más duros de la pandemia han hecho de él un símbolo del consenso en tiempos que requieren de ello.
Además, los populares confirmaron este miércoles que el exdiputado naranja en las Cortes Valencianas Toni Cantó concurrirá como independiente en la lista de Isabel Díaz Ayuso. El político y actor, que dimitió de sus cargos del partido de Inés Arrimadas el 15 de marzo asegurando que quería volver "a su trabajo" -el de la cultura, es uno de los fichajes estrella de los populares, una noticia que no ha sorprendido en ninguno de los dos partidos. "Me he reunido con el equipo de Isabel Díaz Ayuso para conversar sobre la posibilidad de apoyar el proyecto de unión del centro derecha de Pablo Casado en Madrid. Es esencial que esta comunidad siga siendo ejemplo de libertad en Europa y motor económico de España", aseguró Cantó en su perfil oficial de Twitter.
Esta noticia ha provocado un choque entre la dirección nacional del PP y el partido a nivel autonómico. El secretario general de Génova 13, Teodoro García Egea, se reunió con Cantó en la sede nacional del partido para explorar algún tipo de acuerdo con el también exmiembro de UPyD, algo que pilló por sorpresa al entorno de Ayuso. Esta noticia le pilló con el pie cambiado a la dirección del partido madrileño, que ni confirma ni desmiente el fichaje de Cantó.