Ciudadanos no está para grandes batallas internas que puedan fracturar, aún más si cabe, el seno de la formación naranja. La presidenta del partido lo sabe y, por ello, no ha convocado un proceso de primarias extenso en Madrid para elegir al cabeza de lista en las elecciones autonómicas del próximo 4 de mayo. Por lo tanto, el exvicepresidente regional Ignacio Aguado repetirá como candidato a la Comunidad de Madrid a pesar del movimiento surgido en Ciudadanos para desplazarle y dar paso a otro miembro naranja. Será nombrado de manera exprés en unas primarias breves a las que no dará tiempo a presentar candidaturas alternativas.
Inés Arrimadas sabe lo arriesgado de su decisión. Su futuro político pasa cómo le vaya a Aguado en los comicios. Si el partido lograra algún escaño, realidad que algunas encuestas apuntan a que se antoja difícil, podría mantener su discurso de utilidad de Ciudadanos para la gobernabilidad, en este caso, de la comunidad autónoma más importante de España. No obstante, si Ciudadanos quedara fuera de la Asamblea de Madrid, se confirmaría lo que se viene hablando y debatiendo en las tertulias desde hace meses: la muerte de los naranjas previa dimisión de su presidenta.
Albert Rivera dimitió tras la debacle electoral del 10 de noviembre de 2019. Arrimadas debería hacer lo mismo aunque fuera por higiene en el partido si se confirmara la desafección que gran parte de sus antiguos votantes sienten ahora por el proyecto liberal.
Y todo esto ocurre cuando Ciudadanos ve cómo se desangra a todos los niveles. A los tres tránsfugas del partido que chafaron la moción de censura al presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras; la renuncia de Toni Cantó a su acta como diputado en las Cortes Valencianas o la dimisión del portavoz adjunto en la Asamblea de Madrid Sergio Brabezo se une ahora la primera baja de un diputado naranja en el Congreso de los Diputados, Pablo Cambronero, que no dimite como parlamentario y se unirá al Grupo Mixto tras la "deriva sanchista" de Arrimadas. Además, a última hora del miércoles se expulsó al senador Emilio Argüeso por realizar "manifestaciones públicas con voluntad de 'infligir un daño relevante' a los intereses y a la imagen tanto del partido como del conjunto de los afiliados".
Arrimadas, aparentemente cansada
Tanto en la sesión de control al Gobierno celebraada este miércoles como tras el Comité Extraordinario del pasado lunes se vio a una Arrimadas aparentemente cansada. "En estos meses hemos tomado decisiones muy difíciles y hemos cometido errores. El que más lamento es que no hayamos sabido transmitir a los españoles la situación tan grave que se producía en Murcia y que no hayamos sabido trasladar el porqué de esta situación. Cada vez que hemos tenido que tomar una decisión, la hemos tomado con un único fin: hacer lo correcto para España", aseguró Arrimadas.
“Vamos a seguir defendiendo el proyecto de Ciudadanos con orgullo y responsabilidad. Lo más importante es la situación de nuestro país. Ciudadanos es un partido incómodo porque luchamos contra corrupción, no la tapamos. Cometemos errores, pero no tapamos delitos. Tendemos puentes cada día mientras otros trabajan para dividir nuestra sociedad en bandos y trabajamos por esa España abierta y moderna, donde no sobra nadie", subrayó.