España dio este jueves un paso hacia la incorporación de un nuevo derecho para los ciudadanos. El Congreso de los Diputados aprobó, con una amplia mayoría, la ley de eutanasia y, por ende, España se convertirá en uno de los primeros países del mundo -el sexto, concretamente-, que regule la muerte digna.
? El #Pleno aprueba por mayoría absoluta el dictamen sobre la Proposición de Ley Orgánica de regulación de la #eutanasia, que será remitida al @Senadoesp.
?? Nota de prensa: https://t.co/8THCO9TKTe pic.twitter.com/qLGQBwtFp1
— Congreso (@Congreso_Es) December 17, 2020
La propuesta contó con 198 votos a favor (PSOE, Unidas Podemos, la izquierda minorista, Ciudadanos y el PNV), 138 en contra (PP, Vox y UPN) y dos abstenciones (un diputado del PDeCAT, Ferran Bel, por convicciones católicas; y el diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte). El diputado ERC Joan Capdevila no votó por sus creencias, al igual que Bel. Ahora, pasará al Senado para que los grupos presenten enmiendas y ser, de nuevo, debatido y votado en el Congreso.
Los nombres de Ramón Sampedro, Ángel Hernández o Luis Montes resonaron en el Congreso recurrentemente mezclados con las palabras "Libertad" o "Ampliación de derechos". La exministra de Sanidad y diputada del PSOE encargada de defender el proyecto, María Luisa Carcedo, defendió que la ley "piensa en la condición humana, que es vida, pero también padecimiento y muerte". Para Carcedo, la eutanasia "es un instrumento del que disponemos para ponerlo al servicio de un proyecto humanizador. Es un derecho que nos hace libres". "El Estado no puede permanecer impasible ante el sufrimiento de muchas personas", subrayó.
El parlamentario popular José Ignacio Echániz tachó el texto legislativo de "inconstitucional, inoportuno, frívolo, chapucero e injusto" y expuso el plan de Génova 13 como alternativa a la ley de eutanasia: una ley de derechos y garantías ante el proceso final de la vida que incluya la sedación, la universalización de tratamientos paliativos y el testamento mínimo vital para asegurar que no haya muerte con sufrimiento.
El bloque de la derecha continuó en la línea del apocalipsis ante esta ley. El diputado de UPN Carlos García Adanero aseguró que “esto es como el suicida que está en el alero, Se le puede mandar la policía y los psicólogos o empujarlo. Ustedes lo van a empujar”. La parlamentaria de Vox Lourdes Méndez Monasterio tachó la ley de "industria de muerte" procedente de "los herederos del terrorismo, la izquierda radical y los enemigos de España".
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no pudo asistir al pleno porque guarda cuarentena en el Palacio de La Moncloa tras ser contacto estrecho del presidente de Francia, Emmanuel Macron. Sin embargo, aseguró olo siguiente en Twitter: La aprobación en el Congreso de la Ley de Eutanasia supone una gran conquista social para nuestro país. Avanzamos en libertad, en derechos civiles y en dignidad. Gracias a los grupos que han apoyado esta norma y a las personas y colectivos que han trabajado para conseguirlo".
La aprobación en el @Congreso_Es de la Ley de #Eutanasia supone una gran conquista social para nuestro país. Avanzamos en libertad, en derechos civiles y en dignidad. Gracias a los grupos que han apoyado esta norma y a las personas y colectivos que han trabajado para conseguirlo. pic.twitter.com/Px09WoJ1od
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) December 17, 2020