El panorama político de la Comunidad de Madrid apenas cambiaría si se celebrasen elecciones autonómicas: el PP podría seguir gobernando aunque perdiera los comicios gracias al apoyo, interno o externo, de Ciudadanos y Vox, mientras que el PSOE ocuparía la oposición aunque ganara las elecciones con un bloque de centro izquierda que, si bien es fuerte, no es predominante para gobernar. El partido de Ángel Gabilondo sería el ganador moral de las elecciones, con un 28,5% de los votos (38-39 escaños) frente al 24,3% del PP de Isabel Díaz Ayuso (33 escaños).
Más Madrid desbancaría a Ciudadanos de la tercera posición, con un 14% del electorado (19 escaños). Ignacio Aguado y los suyos no sufrirían tanto la pérdida de escaños y votos como el partido a nivel nacional, con un 13,9% de los votos (18-19 escaños). Vox se vería reforzado aunque no saldría de la quinta posición, con un 12,7% (17 escaños) y Unidas Podemos no levantaría el vuelo: solo tendría el 5,1% del electorado (seis escaños).
Por lo tanto, la política de bloques apenas cambiaría: el centro-derecha (PP, Ciudadanos y Vox) seguiría siendo hegemónico en Madrid y aglutinaría al 50,9% de los votos (68-69 escaños) frente al 47,6% del centro-izquierda (PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos, con entre 62 y 64 escaños). Por ende, solo superarían la mayoría absoluta de la cámara de 67 escaños.
Por lo tanto, la política de bloques apenas cambiaría: el centro-derecha (PP, Ciudadanos y Vox) seguiría siendo hegemónico en Madrid y aglutinaría al 50,9% de los votos (68-69 escaños) frente al 47,6% del centro-izquierda (PSOE, Más Madrid y Unidas Podemos, con entre 62 y 64 escaños). Por ende, solo superarían la mayoría absoluta de la cámara de 67 escaños.
“Volvemos a solicitar al Gobierno que anule el estado de alarma, impuesto en Madrid y en otras ocho grandes ciudades de la región. Esto es una intervención atropellada contra el motor económico de España. Sirva como ejemplo la magnífica expresión de la ley a ley”, aseguró en una dura arueda de prensa la pressidenta madrileña. "La manera de actuar contra Madrid es una sucesión de ataques contra los derechos y libertades", sumó, recordando que “la libertad requiere de un marco legal que sea efectivo, es decir, normas ponderadas, claras y de obligado cumplimiento”.
A pesar de que la reunión del Grupo Covid-19 entre el Ministerio de Sanidad del Gobierno y la consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid "fue bien", según ambas fuentes, ninguna de las partes dio su brazo a torcer. Illa defiende que hay que mantener el estado de alarma ya no solo porque se controle la incidencia acumulada por debajo de los 500, sino que hay que alcanzar los 100 casos por 100 habitantes, mientras que Escudero defiende la efectividad de las zonas básicas de salud.