Torra ha justificado la desobediencia civil del Tsunami Democràtic, que “se está criminalizando”, aunque sí ha condenado la violencia de estos días. Lo ha hecho con tono activista en una entrevista en TV3. También niega haber salido ayer a rebufo de Sánchez porque para él tiene una “importancia nula” lo que le pida el presidente y no cree que fuese un error haber salido a la hora que lo hizo.
El president ha vuelto a insistir en la teoría de los infiltrados. Dice que había “gente externa que normalmente no está en este tipo de manifestaciones”. Pero ninguna prueba. Dice que esperará a “las investigaciones que seguro hará la policía catalana” para conseguir alguna pista. Cero certezas.
Además, ha dado su apoyo a los Mossos y ha defendido su doble misión de “mantener la seguridad y garantizar el derecho a la protesta”, aunque reconoce que ha visto imágenes que no le han gustado. Y lo zanja: “En los casos en los que los protocolos hayan sido vulnerados, se investigará”.
Buch, relación con los CDR y autodeterminación
Torra ha hablado también de las discrepancias con el conseller de Interior, Miquel Buch. Dice que tiene con él la misma confianza que con el resto del Govern, a pesar de las informaciones que apuntan a la posibilidad de destituirlo.
No se ha desvinculado tampoco de los CDR investigados. No ha aclarado si tiene o no relación con ellos, aunque Sanchis le ha insistido en la pregunta. No le da credibilidad a las informaciones que se han publicado: “Si tuviera que hacer caso de estas filtraciones que solo buscan criminalizarme, no podría trabajar”. Ya de paso ha señalado a la SER por publicar esas “filtraciones sin contrastar”. Dice que no va a “caer en el error de comentarlas”.
Y más avances en la independencia. Las líneas a seguir ahora, la amnistía, la recuperación de derechos y la autodeterminación. Confía en que en primavera haya una base para redactar la constitución catalana y dice que se ve con fuerza para “avanzar en el derecho a la autodeterminación”. Cree que habrá presupuestos, pese a las tensiones con ERC y, de momento, no hay elecciones cerca: “Es lo último que nos podemos permitir”.
También ha hablado de su relación con Sánchez. Reconoce que no ha tenido ningún contacto con él y que las conversaciones están en punto muerto: “¿Qué más quiere que haga?”. Además, critica la falta de propuestas del PSOE para Cataluña con alguna pulla: “¿En qué se ha diferenciado la presidencia de Sánchez de la de Rajoy?”. De hecho, cree que el Gobierno “no tendrá escrúpulos para aplicar el 155”.