La séptima edición de Gran Hermano VIP no podía haber empezado mejor. Además de con un inicio doble, el del miércoles y el del jueves, ya tenemos mucho de que hablar tras producirse uno de los momentos más surrealistas de la historia del reality show.
Nos referimos a la amenaza que, de cumplirse, llevará a Mila Ximénez a convertirse en la concursante que menos horas ha durado en la casa de Guadalix de la Sierra tras sentirse vejada por la organización, tal y como esta ha deslizado durante sus primeros instantes en GH VIP 7.
Todo empezaba cuando Jorge Javier Vázquez le decía a Mila que tenía que por la gatera de la casa. Algo a lo que la colaborador ade Sálvame se negaba: “Yo no entro por la gatera, porque no me da la gana. Me voy a joder la espalda y se me va a desplazar el balón gástrico”, repetía en varias ocasiones con cara de muy pocos amigos y las malas pulgas de siempre en versión aumentada.
Finalmente, Jorge Javier le permitió acceder por la puerta principal, si bien la periodista ya estaba de mala leche tras entrar con el pie torcido. Tanto es así que, tras conocer las condiciones en las que tiene que vivir en GH VIP, ha informado a la dirección que se niega a hacerlo. Según sus propias palabras “yo por esto no paso, mañana mismo me voy de aquí” esgrimía de malas maneras y claramente nerviosa". Veremos si aguanta o si se va hoy mismo. La dirección, muy enfadada con la poca cuerda que tiene, está lista para lo peor.