Ya lo advirtió el primer día de su retorno a Telecinco forzoso para poder seguir pagando facturas. Retornaría, pero lo haría a su manera. Sin amigos, sin pelos en la lengua y soltando todo lo que supiera aunque pudiera hacer daño. Así era él y así lo iba a seguir siendo.
Una amenaza que, poco a poco, hemos podido ir comprobando era real y que en la última emisión de Sálvame adquiría un nuevo nivel al poner patas arriba la cadena que le paga. Lo hacía al revelar un contrato confidencial como es el que le una a la cadena a Belén Esteban. A Kiko le daba igual, creía que España tenía el derecho a saber la ingente cantidad que la colaboradora se embolsa solo por salir en la televisión.
Sin revelarlo, este aseguró que en el programa se producen injusticias manifiestas, dejando claro que la rubia más famosa de España es la que más cobra de largo, diga o no diga, haga o no haga, indignando así a muchos de los seguidores del programa en las redes sociales.
Con cifras que rondarían el medio millón de euros, la de San Blas quiso cortar el tema por lo sano asegurando que "no tengo nada que decir, porque si lo digo puede que lo que diga moleste a la gente y a mi compañero que le adoro, Kiko Hernández".
Palabras a las que se sumó un Jorge Javier que le echó un cable agregando: "Belén, no tienes que enfadarte por esto, lo que tienes que hacer es sentirte orgullosa".