El presidente de EEUU, Donald Trump, fue el anfitrión de un evento en la Casa Blanca, celebrado el pasado lunes, para honrar a los indígenas Navajo; nativos americanos héroes de guerra que usaron sus idiomas nativos para crear códigos que ayudaron a los Estados Unidos a ganar la Segunda Guerra Mundial (1939-1945).
Trump aprovechó la ocasión y en su discurso llamó a la Senadora Elizabeth Warren, “Pocahontas”.
“Solo quiero agradecerles porque son personas muy especiales. Ustedes estuvieron aquí mucho antes de que ninguno de nosotros estuviera aquí” , dijo Trump a los nativos que estaban a su lado. “Aunque tenemos un representante en el Congreso que dicen que estuvo aquí hace mucho tiempo. La llaman Pocahontas “, añadió Trump en tono jocoso.
Trump no se refirió directamente a Warren, en esta ocasión, pero “Pocahontas” es como comúnmente Trump llama a la senadora para burlarse de sus supuestas raíces Cherokee.
Todo esto lo dijo frente a un retrato del ex presidente Andrew Jackson, quien dirigió ataques militares contra nativos americanos a principios del siglo XIX .
Algunas personas en la audiencia se rieron, pero los veteranos Navajo, no reaccionaron.
“Es profundamente desafortunado que el presidente de los Estados Unidos no pueda asistir a una ceremonia en honor a estos héroes sin tener que soltar insultos racistas”, dijo Warren en una entrevista en MSNBC.
“Donald Trump lo hace una y otra vez pensando que de alguna manera me va a hacer callar. No funcionó en el pasado, no va a funcionar en el futuro” -añadió-
Por otro lado, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders calificó de “ridícula” la afirmación de Warren de que el apodo de Trump hacia ella sea un insulto racista, y agregó que realmente no era la intención del presidente emitir ningún “insulto racial” delante de los indígenas navajos.
«Lo que mucha gente realmente considera ofensivo es que la senadora Warren mintiera sobre sus orígenes para impulsar su carrera», dijo Huckabee Sanders.
Y concluyó diciendo que Donald Trump siente «un respeto extremo» por los nativos americanos a los que recibió en la Casa Blanca.