A pesar de que en Suiza no se considera delito destrozar o tirar dinero, las autoridades investigan quién pudo tirar unos 100 euros, en billetes de 50, en los retretes de tres restaurantes del centro de Ginebra, y por el inodoro de una sucursal del banco UBS.
La única pista que arroja este caso es la posibilidad de que fueran dos mujeres españolas las que protagonizaran este insólito suceso. Se sospecha que el dinero lo tenían guardado en una caja fuerte de la céntrica sucursal del UBS, lo retiraron y lo cortaron con unas tijeras, antes de arrojarlo a los váteres.
Los responsables de los restaurantes se quejaron a las autoridades de que alguien, intencionadamente, los había atascado. La sorpresa fue que el atasco lo provocaba una masa de billetes troceados.
