Ha ocurrido este domingo. Una familia de seis miembros, la menor de ellos una niña de 9 años, ha perpetuado una serie de ataques suicidas contra tres Iglesias en la segunda ciudad más grande de Indonesia, Surabaya.
Según Tito Karnavian, jefe de la policía, el primer ataque se produjo a las 7:30 am hora local.
La madre y sus dos hijas de 9 y 12 años se inmolaron en la Iglesia Indonesia Cristiana Diponegoro; mientras que el padre y otros dos hijos causaron explosiones en dos templos religiosos.
El padre condujo un coche cargado de bombas hacia la iglesia Pentecostal del centro de Surabaya. La madre junto a sus hijas tenían explosivos adheridos al cuerpo. Otros dos hijos de la familia, de 16 y 18 años de edad, fueron en motocicleta hasta la Iglesia Católica de Santa María y detonaron explosivos que llevaban a cuestas, este fue el primer ataque.
Este ataque, reivindicado por el autodenominado, Estado Islámico, deja alamenos 13 muertos y 40 heridos.
Este atentado es el más mortífero, en Indonesia, desde el año 2005.