El rey Felipe VI presidió el acto de entrega de la XXVI edición del Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio a Tomás de la Quadra-Salcedo, por su larga y fructífera trayectoria en el ámbito jurídico y su contribución a la sociedad española.
Don Felipe entregó a Tomás de la Quadra-Salcedo el Premio Pelayo, reconocimiento a Juristas de Reconocido Prestigio por sus aportaciones y dedicación a la Justicia, en un acto en el que felicitó Tomas de la Quadra-Salcedo por el galardón recibido y destacó “la labor de los grandes juristas en nuestra sociedad tiene un profundo significado porque España es un Estado de Derecho pleno y moderno. El respeto efectivo al Derecho es y debe ser siempre insignia, emblema y distintivo de nuestra democracia. Se trata de un elemento que se constituye en esencial constitutivo esencial de nuestra convivencia como pueblo”.
También, Don Felipe subrayó que “el Estado de Derecho no puede ser para nosotros algo rutinario, neutro y mecánico; tampoco ajeno a los valores, ni insensible ante las necesidades sociales. Nuestro Estado de Derecho es social y democrático, según la formulación constitucional. Por ello, debe alcanzar los altos ideales de libertad, justicia, igualdad y pluralismo político inherentes a la dignidad de la persona”.
Estado de Derecho que “para su cabal funcionamiento resulta indispensable un sistema judicial independiente fruto, de la separación de poderes. Estos poderes conviven y actúan sin interferencias, respetando la órbita de los demás. Desde este punto de vista, la garantía jurisdiccional por los jueces y tribunales de los derechos de cada uno y del cumplimiento de sus deberes viene a ser la coronación del Estado de Derecho, que alcanza su más alta expresión institucional en el Tribunal Constitucional y en el Tribunal Supremo”.
Su Majestad el Rey se refirió durante su intervención al premiado subrayando tres rasgos que van más allá del hecho de ser un hombre de leyes. “En primer lugar, su compromiso con el servicio público; su vocación de servicio al Estado con gran competencia, dedicación y profesionalidad, lo que debemos agradecerle. En segundo lugar, su compromiso social vinculado a la promoción por los poderes públicos de la realidad y efectividad de la libertad y de la igualdad, a las que se ha referido en su intervención y que constituyen una seña de su identidad. Finalmente, su compromiso con nuestra Constitución, cuyos trabajos de elaboración apoyó y de la que siempre ha resaltado su indudable significado político y dimensión histórica y su enorme trascendencia para la convivencia en la España de nuestros días”.
“Tomás de la Quadra-Salcedo se une así a los grandes maestros universitarios que han transmitido a las nuevas generaciones de españoles el conocimiento actualizado del Derecho. Hay en ella ilustres representantes de la abogacía, de la magistratura y de la Fiscalía, junto a miembros destacados del Tribunal Constitucional y juristas de Estado, que proporcionan su consejo al Gobierno y a las más altas instituciones”, dijo Don Felipe.
En el acto también intervinieron el alcalde de Madrid, que dio la bienvenida a los asistentes; Joaquín Tornos Mas, catedrático de Derecho Administrativo, quien realizó la semblanza del galardonado; Antonio Garrigues Walker, presidente del Jurado, que comentó la composición del Jurado que emitió el fallo y el desarrollo del mismo; y José Boada, presidente de Pelayo, que puso en valor los objetivos de este reconocimiento y convocó el XXVII Premio Pelayo para Juristas de Reconocido Prestigio.