El ex jugador de fútbol americano Paul Duncan ha fallecido a los 35 años de edad después de sufrir un paro cardíaco mientras corría cerca de su casa. El deportista, que tenía dos hijas pequeñas con su esposa, Ellen, cayó inconsciente sobre la acera de su barrio el pasado viernes, 15 de julio, según recoge la web de Informativos Telecinco. Al día siguiente, los médicos del hospital donde fue internado ya avisaron a la familia de que el joven se encontraba en muerte cerebral.
Ellen Duncan, que ha sido la encargada de confirmar el deceso de su marido a través de un mensaje colgado en la red social Instagram, ha dicho que el cuerpo del jugador será "donado a personas que necesitan órganos y para investigación médica". La mujer también ha desvelado que, cuando anunció a sus hijas el triste desenlace, Dillon, la pequeña, pidió escuchar "la canción que papá acababa de agregar a la lista de reproducción de la mañana".
"No sabía a qué se refería, así que busqué en nuestra aplicación de música de Amazon y me señaló "Solo puedo imaginar", de MercyMe", ha explicado Ellen a sus seguidores. Además, ha publicado un vídeo en el que Paul Duncan aparece bailando en una reunión familiar. "Paul, definitivamente, bailó conociendo a Jesús", ha indicado la viuda, dando también las "gracias por el amor y el apoyo continuos".
Paul Duncan ejerció de liniero ofensivo de los Fighting Irish entre 2005 y 2009. Después de graduarse en Notre Dame, el jugador pasó un tiempo en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) con los Denver Broncos como agente libre no reclutado. La cuenta de Twitter de los Notre Dame ha emitido un comunicado después de su muerte. "Nuestras oraciones están con la familia y los amigos de Paul Duncan. Un gran compañero de equipo, pero más importante aún, un amoroso esposo y padre", reza el texto.
Our prayers go out to the family and friends of Paul Duncan.
A great teammate, but more importantly a loving husband and father. pic.twitter.com/8VEDBy2nYf
— Notre Dame Football (@NDFootball) July 20, 2022
El funeral de Duncan se celebrará en Brookhaven, Georgia, donde reside la familia. Esta es la segunda noticia trágica en apenas una semana para este deporte tan popular en Estados Unidos. Spencer Webb, un jugador universitario, perdió la vida hace unos días en un lago de Oregón con tan solo 22 años.