La Mancha y Castilla la Nueva poseen una cocina abundante de platos serios, recios y venerables, especialmente antiguos, como sus maravillosas sopas, ideales para el invierno. Un ejemplo de estas cualidades es la cachuela, considerada como una tremenda sopa invernal, preparada a base de cerdo. Ofrece también el tojunto, que se prepara con carne o con cerdo, patatas, cebolla, pimientos y ajos. Todos estos ingredientes se mezclan crudos en una olla y se cocinan “todos juntos”, de esta frase proviene el nombre de esta delicia culinaria.
Estudios relacionados con la gastronomía española revelan que entre los platillos tradicionales de esta región se encuentra el morteruelo, que comúnmente se acompaña con foie-gras, un antiguo guisado de trigo, el pisto manchego y las perdices, que es un plato fundamental en toda la Mancha y en Toledo.
La variedad de la cocina española la ha hecho célebre en muchísimos de lugares de todo el mundo y la gran mayoría de sus regiones ofrecen imponentes platillos, absolutamente deliciosos. Por ejemplo, Castilla la Vieja se destaca por ser una zona que ofrece grandes asados elaborados a base de lechón y cordero joven. Pero su variedad sigue imponiéndose, porque esta es una tierra rica en pescados de agua dulce, como las truchas, las tencas, los pececillos de río Adaja y los deliciosos cangrejos.
León ofrece magníficas recetas
León se enorgullece de sus migas canas, un platillo pastoril y exquisito, de muy rancio abolengo. Igualmente destaca su oferta gastronómica de chorizos y chanicería. Los chorizos que se elaboran en León son un ingrediente básico de la poderosa empanada de batallón, la cual también incluye jamón, cebolla, pimientos del país y cebolla fresca.
León ofrece platos como el hornazo, considerado como una empanada medieval preparada a base de chorizos, jamón, huevos duros y perdiz, que es uno de los grandes recuerdos de las comilonas feudades. Las comidas tradicionales de León incluyen el butillo es un platillo célebre y un delicioso embutido preparado a base de huesos de cerdo no muy montados, adobados con pimentón. Un toque especial lo aporta la morcilla típica, elaborada con la cebolla y arroz, una mágica combinación que suele complacer a mucha gente.
Las delicias gastronómicas marineras de la cocina de Castilla
La cocina tradicional marinera de Castilla se concentra en Santander, que contempla varias especialidades del mar, entre ellas las famosas sardinas de Laredo y las increíbles rabas de pulpo fritas. Las especialidades culinarias de las tierras montañesas son realmente fabulosas, como los callos, las habas, el pollo campurriano y un platillo peculiar: el arroz sandanterino, que se guisa utilizando manteca de vaca – una grasa excepcional en los antiguos recetarios españoles -, incluye también leche, agua y trozos grandes de jamón.
La deliciosa gastronomía española ha conquistado históricamente los más exigentes paladares, gracias a varios elementos, como su sabor, textura, aroma y variedad. La distinción de sus magníficos ingredientes le confiere a todos sus platillos un codiciado lugar en las más importantes mesas de cualquier restaurante de comida internacional alrededor del mundo.