Esto es debido a la situación actual de estos ríos y las previsiones de lluvias persistentes para las próximas horas.
Dicha fase de alerta responde a escenarios en los que existen previsiones de posibles emergencias, pero que dadas las circunstancias y en caso de una evolución desfavorable, es posible su desencadenamiento.
Un Consejo Asesor formado, entre otros organismos, por el Gobierno Vasco, las Diputaciones Forales y los Alcaldes de aquellos municipios que puedan verse afectados por posibles inundaciones, se encuentra en situación de preaviso a la espera de ser convocado únicamente en el caso de que se decida pasar a la fase de emergencia.
Si esta situación empeorara, el Consejo Asesor se reuniría para adoptar todas aquellas medidas que se estimen oportunas para coordinar los trabajos dirigidos a paliar los efectos causados por las abundantes lluvias.
Al mismo tiempo, ya han sido alertados los servicios de emergencia y protección civil (Ertzaintza, Bomberos, Policías Locales, agrupaciones de voluntarios etc…), en previsión de que puedan producirse inundaciones.
De igual modo, se está realizando un seguimiento intensivo de las cuencas de dichos ríos, muy especialmente por parte de la Agencia Vasca del Agua, URA, la Agencia Vasca de Meteorología, Euskalmet y las Diputaciones Forales.