En los calabozos del cuartel de San Fernando un joven había sido detenido por un asunto de tráfico. Es cacheado por uno de los agentes, y posteriormente es esposado. Uno de ellos mira fijamente al muchacho que permanece tranquilo, y se percibe una sonrisa justo antes de hacer un movimiento rápido, impulsivo, visceral. El policía atiza al joven indefenso con sus duras botas de uniforme justo en la cara, y el chico no hace nada.
Así es la prueba de la Fiscalía en el caso que juzga en la Audiencia Provincial a cuatro agentes de la Policía Local de Palma. El cuarteto de policías autor del abuso está acusado de agredir en los calabozos del cuartel de San Fernando a un chico que había sido detenido por cuestiones de tráfico.
REACCIÓN EN LA RED
El joven estaba inmovilizado con las esposas, con las manos a la espalda. En la muestra audiovisual se ve como el resto de los agentes atentos de la escena de la agresión permanecen sin inmutarse. Además, justo después de propinar la patada, uno de los testigos del brutal y espeluznante azote de la ley aparta la cámara para que no quede registro de lo que estaba ocurriendo.
[Sumario]
La Fiscalía ha pedido cuatro años para el agente agresor y un año para cada uno de los tres agentes por permitir que ocurriesen los hechos. En los comentarios del vídeo que ha hecho público Hoy por Hoy Mallorca en Facebook, la ciudadanía toma una postura dispar. "Si fuese policía me daría vergüenza ajena salir a patrullar", comenta un internauta. Otro responde: "Vivimos por desgracia en un estado policial sin precedentes en nuestra Democracia y ahora se ven más protegidos por leyes como la ley mordaza".
En otros casos una lectora anónima a comentado que a su novio "le dieron una paliza cinco policías nacionales en casa cuando fui yo la que llame por un problema con una vecina". En cualquier caso, la crispación ha llegado al punto en el que Hoy por Hoy ha tenido que rogar moderación y recordad que "no se hace responsable del contenido de vuestras publicaciones".
