La ex concursante del reality show 'Mi vida con 300 kilos' Destinee LaShaee ha muerto a los 30 años de edad. De momento, se desconocen las causas del fallecimiento. La triste noticia la ha dado su hermano, Wayne Compton, a través de la red social Facebook. El joven lamenta la muerte repentina de su hermana y siente que ésta, que padecía problemas psicológicos, se haya sentido sola hasta el final. "No, no, no, lo siento hermana, te aceptaba por lo que eras, aceptaba cada defecto que venía contigo, siento que te sintieras sola, siento que sintieras que no tenías a nadie más a quien recurrir. Ojalá el destino no hubiera querido esto. Señor, ¿por qué sigues quitándome a mis hermanos? ¿Cuánto puedo aguantar?", ha escrito Compton con desesperación, en referencia a otra hermana que también perdió la vida tiempo atrás.
Destinee LaShaee apareció en la séptima temporada del programa, emitido en España en 2019 por la cadena DKISS, y fue la primera participante transexual del formato, en el que el Doctor Now ayuda a sus protagonistas a bajar de peso de una forma saludable y también quirúrgica. La joven entró al concurso pesando 303 kilos y con una depresión y una ansiedad desbocada que calmaba a través de la comida.
Al final del reality había perdido 103 kilos, ayudada en parte por una cirugía de manga gástrica. No obstante, acabó adelgazando más de 200 kilos en total gracias al estilo de vida que mantenía y que compartía en sus redes sociales para inspirar y motivar a sus seguidores. Los problemas económicos de su familia han obligado a poner en marcha una campaña de 'crowfunding' para poder costear el funeral de Destinee LaShaee y el traslado de su cuerpo a su ciudad natal.
Sin embargo, LaShaee no ha sido la única ex concursante de 'Mi vida con 300 kilos' que ha fallecido tras pasar por el polémico formato. En agosto del pasado año se conocía la muerte de Gina Marie Krasely por una enfermedad que arrastraba debido a su obesidad. Además, Lisa Fleming, también ex participante del programa norteamericano, perdía la vida en 2018. Un mes antes, James L.B. Bonner, de 30 años de edad, los mismos con los que ha muerto Destinee, fallecía después de su participación en el reality.
Mientras, los expertos no se cansan de alertar de los peligros de someterse a dietas extremas con la esperanza de quitarse kilos de encima rápidamente. Tal y como explica el dietista y nutricionista Ismael Martínez en el diario Las Provincias, este fenómeno se ha acrecentado con la pandemia. Una alimentación basada en un consumo excesivamente bajo de calorías durante un corto periodo de tiempo no es ni mucho menos recomendable.
Además, la pérdida drástica de peso no siempre es de grasa. En el proceso, también se pueden eliminar líquidos y deteriorarse el tejido muscular. "Esta pérdida de líquidos puede poner en compromiso la salud renal", subraya Martínez, que recuerda igualmente que las dietas muy restrictivas pueden causar deshidratación y llevar a la falta de nutrientes esenciales, como el hierro o el calcio. "Los hidratos son imprescindibles. Practicar deporte sin ellos, no es sostenible. Por la falta de vitaminas, el pelo se puede caer, y las uñas se vuelven quebradizas", avisa el especialista.
"De esta manera, el paciente no pierde masa muscular y le es más fácil estar en déficit. El proceso no sirve de nada si no enseñamos al paciente a comer. El organismo se acostumbra a gastar menos calorías, y cuando el paciente abandona la dieta y come normal, recupera el peso perdido e incluso más. Además, la restricción excesiva puede conllevar atracones, pérdida de adherencia a la dieta y frustración por saltársela", alerta.