Un gran grupo de productores de frutas y hortalizas provenientes de Almería, La Rioja y otras zonas de España se han reunido este miércoles ante el Ministerio de Agricultura en Madrid para protestar contra la escalada de los costes de producción (fertilizantes, electricidad, productos fitosanitarios…) y contra lo que, desde las principales organizaciones agrícolas (Asaja, COAG, UPA y, en representación de Cooperativas Agroalimentarias, Coexphal) consideran como “una falta de control” hacia los productos agroalimentarios de terceros países, especialmente Marruecos y Turquía.
Paralelamente, las organizaciones antes mencionadas están negociando el cronograma de movilizaciones para las próximas semanas y esperan con expectación el encuentro convocado este lunes por el ministro de Agricultura Luis Planas con representantes de toda la cadena alimentaria (productores, industria y distribución).
Las principales organizaciones agrarias han propuesto al Ministerio de Agricultura impulsar iniciativas como una tarifa eléctrica específica para la actividad agraria, medidas fiscales como un IVA agrario reducido del 10% para todos los insumos necesarios para la producción (fertilizantes, productos fitosanitarios, piensos, agricultura, diésel, etc.) y servicios agrícolas, así como una revisión al alza del IVA compensatorio para los agricultores en estimación objetivo del 12 al 14%, así como la deducción de la factura de fertilizantes y plásticos no depreciables.
También han pedido que “se revise el precio de entrada de la cuota de tomate contemplada en el acuerdo comercial de la Unión Europea con Marruecos” y que se reconozca el sector. Un mensaje dirigido a ministerios como Consumo y Vicepresidencia IV y Ministerio de Transición Ecológica.
7.700 euros más
El presidente de Asaja Almería, Antonio Navarro, advirtió que “ante el aumento de los insumos y los problemas de los acuerdos comerciales con Marruecos, tengo muy claro que muchos agricultores se van a quedar en el camino, no van a sobrevivir”. A modo de ejemplo, el responsable de esta organización en la provincia andaluza, ha explicado que los costes energéticos han aumentado un 270% respecto a la campaña anterior, así como los plásticos un 35% – en Almería el cultivo en invernadero tiene un peso muy relevante – así como los fertilizantes, que ya son un 64% más caros. “Una hectárea de cualquier hortaliza está costando esta campaña 7.700 euros más que la anterior”, ha apuntado.
En este sentido, Navarro ha lamentado que a diferencia de otros años no se vayan incorporando jóvenes agricultores y también habla del desembarco de fondos de inversión dispuestos a echar redes de inversión en el río revuelto que es hoy el campo. «En Almería la mayoría de las explotaciones son de propiedad familiar, donde ya hay dos o tres generaciones trabajando. Si seguimos con toda esta situación, en muy pocos años vamos a tener muchos problemas”, advirtió.
Por su parte, el secretario general de la UPA Andalucía, Cristóbal Cano, ha destacado el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria, cuya segunda reforma acaba de pasar el filtro del Senado y próximamente será votada definitivamente en el Congreso de los Diputados. «Es la única herramienta que permite al agricultor cobrar un precio digno y solo por su trabajo», dijo Cano, quien cree que está en juego la soberanía alimentaria de España y la Unión Europea (UE). En este sentido, ha aclarado que “esto no implica que el consumidor pague más por los productos” y reclama “una distribución justa y proporcional” entre producción, industria y distribución.