El Gobierno de España ha cerrado esta mañana el anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) después de que el PSOE y Unidas Podemos hayan desencallado la Ley de Vivienda, condición irrenunciable de los de Yolanda Díaz para dar luz verde a las cuentas públicas del próximo año. Tras un año de enquistamiento, el Ejecutivo ha emitido un comunicado a través del cual confirma el acuerdo entre los dos socios del Palacio de La Moncloa.
Cabe destacar que la presentación de los PGE ya va con retraso. La ley marca que el borrador de Presupuestos debe estar preparado al fin del tercer trimestre del año en curso. Es decir: el pasado 30 de septiembre fue el último día en el que debería haberse cerrado el acuerdo presupuestario. La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, aseguró hace unos días que solo quedaban "algunos flecos" que determinar para cerrar el acuerdo. Estos flecos eran en realidad una sola reivindicación de Unidas Podemos: la Ley de Vivienda, algo que el PSOE quiso desligar de la negociación de las líneas presupuestarias pero que no ha podido llevarse a cabo.
El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños; y la de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, han sido los dos miembros del Gobierno que han encauzado las negociaciones en las últimas horas. Ambos estuvieron reunidos durante toda la mañana del lunes junto a la ministra de Transportes, Raquel Sánchez; y el secretario general de Vivienda, David Lucas, pero no consiguieron cerrar un acuerdo.
El ala socialista del Gobierno se negaba a poner un precio tope a los alquileres en las zonas tensionadas y apostaban por un sistema de incentivos fiscales a los propietarios, así como congelar contratos como fórmula para limitar dichos precios. Unidas Podemos se mostraba escéptica y apuntaba a un presunto incumplimiento del acuerdo de investidura. Belarra puso encima de la mesa que el techo a los precios solo entrase en vigor para las grandes rentas.
Sánchez, pendiente de los PGE en La Palma
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha visitado este domingo, por tercera vez desde la erupción del volcán Cumbre Vieja, la isla de la Palma, donde se ha reunido con el presidente del Gobierno de Canarias, Ángel Víctor Torres, y el presidente del Cabildo Insular, Mariano Hernández, y ha comunicado la inminente aprobación del segundo paquete de ayudas.
Las ayudas, que forman parte del Plan Especial para la Reconstrucción de La Palma, estarán destinadas a garantizar viviendas, negocios, plantaciones e infraestructuras, así como a paliar el problema de abastecimiento de agua en la isla e intervenir en materia de empleo, agricultura o turismo. Este nuevo paquete de medidas será aprobado por Decreto Ley en el Consejo de Ministros de próximo martes.
"El Consejo de Ministros va a aprobar el próximo martes un paquete de medidas muy potente en materia de reconstrucción de infraestructuras, suministro de agua, empleo, agricultura, sector turístico, beneficios fiscales… por un importe total de más de 206 millones de euros", ha anunciado Sánchez.