La presidenta del Parlament de Cataluña, Laura Borràs, no parece que esté por la labor de aceptar la sesión de investidura del candidato del PSC y ganador de las elecciones el pasado 14 de febrero, Salvador Illa. La mano derecha de Carles Puigdemont no tiene previsto buscar un hueco en el que pueda meterse el exministro de Sanidad a no ser que consiga los apoyos suficientes para sacar adelante su candidatura, algo que es realmente complicado. Borràs desea que el acuerdo de ERC y JxCAT no descarrile y, a lo largo de este fin de semana, se alcance un acuerdo que consiga que Pere Aragonès sea presidente de Cataluña. Cuando esté todo negro sobre blanco, la presidenta de la cámara, la presidenta convocará un pleno antes del viernes 26, el día tope según el reglamento, para celebrar un debate de investidura.
La jefa de la cámara catalana asegura a sus cercanos que no tiene prisa por convocar una ronda de contactos con las formaciones porque da por seguro que este acuerdo llegará y será pronto. ERC y JxCAT firmaron un preacuerdo la semana pasada y ahora, según fuentes de sendas formaciones, solo queda "culminar la investidura de Aragonès", algo que ven fácil que se produzca durante la semana que viene. Todo dependerá de la CUP y de sus peticiones, que pueden ser más o menos exigentes.
Si la CUP apoyara la investidura, Illa estaría tocado y hundido. A diferencia de Aragonès, que roza la mayoría absoluta gracias al apoyo explícito de los posconvergentes, el PSC solo tendría los 33 escaños que le otorgaron las urnas. Se daría por hecho el apoyo de los comunes, pero apenas ha habido contactos entre Illa y Albiach desde los comicios. Sin embargo, Illa mantiene la esperanza de aspirar al Govern, según subrayó en rueda de prensa tras la constitución del Parlament de Cataluña: "Tengo la legitimidad y la obligación de intentar una investidura. Lo haré".
El intento de llla
El PSC defiende tanto su legitimidad por concurrir a la investidura de Illa por dos razones: fue una de las promesas electorales del propio Illa y parte de los letrados de la cámara apoyan su candidatura al ser el más votado. Por eso, el exministro sigue presionando.
Borràs se ha citado este martes con su vicepresidenta, Anna Caula, y con los tres secretarios de JxCAT, ERC y la CUP simplemente como una primera toma de contacto donde acordaron buscar el máximo consenso posible ante las cuestiones que puedan dividirlos en el órgano rector de la cámara catalana. Ellos cinco, que conforman la mayoría absoluta de la Mesa del Parlament, tendrán una "comunicación permanente" sin necesidad de verse permanentemente. Ese encuentro sirvió incluso para intercambiar teléfonos de aquellos que no se conocían previamente.
Con esta mayoría se impùlsará resoluciones independentistas y podrán bloquear recursos de, entre otros partidos, el PSC. Ciudadanos no está en la Mesa por la negativa de Vox a darle un puesto. De todas maneras, el independentismo hubiera mantenido mayoría absoluta en el órgano rector Parlament.