El hijo de 17 años de la cantante irlandesa Sinéad O'Connor, Shane Lunny, ha sido localizado muerto dos días después de que se hubiese denunciado su desaparición, según ha confirmado este sábado la policía de Irlanda, que había realizado un llamamiento para localizarlo. El joven había desaparecido este jueves, después de marcharse de un centro médico donde se encontraba bajo vigilancia por riesgo de suicidio, y fue visto por última vez en Tallaght, al sur de Dublín, capital del país. Como su madre, padecía algunos problemas de salud mental.
Un portavoz policial confirmó este sábado a varios medios locales que "tras la recuperación de un cuerpo en el área de Bray, en Wicklow, se ha retirado el llamamiento de 'persona desaparecida' con respecto a Shane O'Connor, de 17 años".
Sinéad O'Connor, de 55 años, ha recurrido a Twitter para rendir tributo a su hijo adolescente con un conmovedor mensaje. "Mi hijo bello, Nevi'im Nesta Ali Shane O'Connor, la luz de mi vida, decidió terminar su angustia terrenal hoy y ahora está con Dios", ha escrito. Sus palabras dan a entender que el joven se quitó la vida de forma voluntaria. En 2019, la intérprete ya denunció la desaparición de este mismo hijo, que por aquel entonces tenía solo 14 años.
My beautiful son, Nevi’im Nesta Ali Shane O’Connor, the very light of my life, decided to end his earthly struggle today and is now with God. May he rest in peace and may no one follow his example. My baby. I love you so much. Please be at peace:
— Sinead The 1 And Only (@OhSineady) January 8, 2022
This is for my Shaney. The light of my life. The lamp of my soul. My blue-eye baby. You will always be my light. We will always be together. No boundary can separate us. https://t.co/7b2f0GFDEO
— Sinead The 1 And Only (@OhSineady) January 8, 2022
La cantante, que cambió su nombre por el de Shuhada' Davitt en 2018, también ha colgado en redes sociales una canción de Bob Marley que ha dedicado al menor, uno de los cuatro vástagos que ha tenido la irlandesa. Según aseguran los medios locales, O'Connor había amenazado al Hospital Tallaght con una querella en caso de que "le ocurriera algo" a Shane. La policía había renovado el llamamiento para localizar al joven, con un mensaje en el que describía el aspecto físico de Lunny, la ropa que llevaba, e indicaba el lugar donde se le vio por última vez y que preocupaba "el bienestar" del chico.
El joven Shane Lunny era fruto de la relación que O'Connor mantuvo con el cantante de folk Dónal Lunny. Además, la artista tiene otros tres hijos: Roisin Waters, Jake Reynolds y Yeshua Bonadio.
La controvertida intérprete irlandesa anunció hace algo más de tres años que se había convertido al islam. Comunicó la noticia a sus seguidores a través de una fotografía en la que aparecía llevando un pañuelo tipo hiyab. "Esta es la conclusión natural del viaje de cualquier teólogo inteligente. Todo estudio de las escrituras llevan al islam, lo que hace redundantes todas las demás escrituras. Me darán un nombre nuevo. Será Shuhada", tuiteó la artista.
O'Connor alcanzó la fama mundial en los años 90 con el tema del estadounidense Prince "Nothing Compares 2 U", aunque también es recordada por romper en 1992 en una cadena de televisión americana una fotografía del entonces papa Juan Pablo II, en protesta por los abusos sexuales cometidos contra menores. Siete años después, se ordenó sacerdote de la orden católica disidente de los tridentinos en una ceremonia celebrada en Lourdes (Francia), tras la que adoptó el nombre de Madre Bernadette Mary. La Iglesia Católica irlandesa dijo entonces que esa ordenación era "extraña y absurda".
En los últimos años, la cantante también ha declarado que lucha contra la depresión y que ha tenido a menudo pensamientos suicidas, tras confesar que ella misma fue víctima de abusos en su infancia. En noviembre de 2015, publicó en Facebook una nota en la que anunciaba que se había tomado una sobredosis. La policía la localizó en aquella ocasión en un hotel de Dublín y la trasladó a un hospital, donde se recuperó tras recibir tratamiento médico.
Y en mayo de 2016, O'Connor fue declarada en paradero desconocido y fue localizada de nuevo por la policía, en esa ocasión en la localidad de Wilmette, próxima a Chicago (EEUU). Medios estadounidenses informaron entonces de que la policía fue alertada por alguien de su entorno y estuvo tratando su desaparición como un caso de "posible suicidio".