Victoria Federica trae de cabeza a sus padres. Desde que comenzara la pandemia que asola al mundo, la hija menor de la infanta Elena y Jaime de Marichalar ha sido señalada en varias ocasiones por los medios de comunicación por saltarse a la torera las restricciones y medidas de seguridad impuestas por las autoridades sanitarias. Según cuenta el periodista Saúl Ortiz en el diario 20 Minutos, Marichalar se ha hartado del indefendible comportamiento de la joven y, muy preocupado por la actitud de la sobrina más popular del rey Felipe VI, se ha puesto en contacto con su ex mujer para abordar juntos la situación.
Al parecer, el que fuera Duque de Lugo por su extinto matrimonio con la hija mayor de Juan Carlos I está especialmente enfadado por una de las últimas publicaciones que Victoria Federica ha subido a sus redes sociales. Se trata de una fotografía en la que la hermana de Froilán aparece viendo la televisión con su novio, el DJ Jorge Bárcenas, y varios amigos más en una vivienda sin identificar. Todo, cuando las reuniones entre personas que no conviven en la misma casa están prohibidas en la Comunidad de Madrid desde el pasado 25 de enero.
Tras esta nueva falta de respeto a las normas para evitar la expansión del virus, Jaime de Marichalar habría llamado por teléfono a la infanta Elena para transmitirle su preocupación por la imprudencia y el desahogo de los que hace gala en público la hija que ambos tienen en común. Durante la conversación, de acuerdo con la información de Ortiz, los padres de Victoria Federica habrían llegado a la conclusión de que la joven debe pedir disculpas por desobedecer las leyes en medio de tan grave crisis sanitaria.
Su alma libre, su fuerte temperamento y su parentesco con la Familia Real le han acarreado a Victoria Federica no pocos problemas. A mediados de diciembre, la sobrina de los Reyes de España fue increpada por varias personas cuando paseaba con su chico por Madrid. "¡Ladrona, ladrona!" o "¡Devuelve la pasta!" fueron algunos de los gritos que recibió mientras unos periodistas le preguntaban por el 'exilio' de su abuelo en los Emiratos Árabes Unidos.
La nieta favorita de don Juan Carlos se había visto salpicada recientemente por el caso de las 'royal black'. Según El Confidencial, tanto ella como su hermano, Froilán, podrían haber utilizado tarjetas con dinero opaco para hacer compras en El Corte Inglés, viajar en Uber o Cabify, pagar clases de piano o mantener a una yegua.