Belén Esteban está muy preocupada por el coronavirus. Además de por ser una persona con factor de riesgo por su enfermedad de diabetes, tiene una madre en la tercera edad a la que no ve desde hace dos semanas y a una hija en un país en el que han decidido no tomar ninguna medida para parar el virus, a la espera de que la mayor parte de la población lo pase sin problemas como es Reino Unido.
Una situación, esta última de indefensión para todos los que residen en Reino Unido, que tiene especialmente preocupada a la colaboradora de Sálvame, en tanto en cuanto su hija Andrea Janeiro, más conocida como Andreíta, puede contagiarse en cualquier momento.
Y es que, pese a no estar en el grupo de factor de riesgo elevado, lo cierto es que cada vez son más las personas jóvenes que ingresan con el COVID-19 y que desarrollan problemas como neumonía que les suponen su ingreso automático en la UVI. Algo que tanto Belén como Jesulín esperan no suceda con su hija, quien llevaría ya varios días de confinamiento voluntario para evitar un eventual contagio.