Dice el dicho que las desgracias nunca vienen solas. Algo que cobra especial sentido cuando vemos casos como los de Terelu Campos, quien acumula unos cuantos años de desdichas relacionadas con lo más importante, la salud, que no dejan de reproducirse.
Primero fue su mal, que cuando parecía curado, volvía a hacer aparición y, en paralelo, el ictus de madre y los problemas económicos familiares. Parecía que era imposible que todo fuera a peor. Pero sí, la vida es así y siempre se guarda una última carta para hacerte valorar esa rutina en la que nada sucede y que tanto denostamos.
Justo el día que volvía a la televisión, y que se suponía debía ser una fiesta, Terelu fue informada del fallecimiento del hermano de su padre. Su tío Manolo. Una persona con la que esta guardaba una relación especial desde niña y que le dejaba visiblemente afectada en un día marcado por las emociones encontradas.
A la espera de que todo empiece encarrilarse, desde aquí mandamos el más sentido pésame a la familia y extendemos nuestros deseos a la salud de todos ellos, que ya hace tiempo se merecen que cambie su suerte y todo se empiece, como mínimo a enderezar. Fuerza y ánimo.